El portavoz del PSOE en la Junta dijo "voy a tratar de ser optimista" y utilizó "constructiva" para valorar la actitud de Ciudadanos en el encuentro en el que ayer el Gobierno y el grupo naranja trataron de aproximarse hacia un acuerdo sobre el presupuesto autonómico de 2017. Al hacerlo, Fernando Lastra quiso dejar trazada la línea que divide por su actitud a los interlocutores del diálogo presupuestario. A un lado, los hay "mezquinos" que piensan que "las oportunidades que se abren en la negociación le vienen bien al gobierno"; al otro están los grupos de talante "constructivo" que saben que esta ocasión "a quien le viene bien es a Asturias".
No citó el diputado a Podemos ni a ningún otro grupo como integrante de la primera categoría, pero sí la retrató como la de aquellos que "no tienen disposición de llegar a un acuerdo". Se dijo "más interesado en las actitudes constructivas y positivas", pero se impuso la tarea, pese a todo, de no descartar a nadie, de "tratar de que no haya nadie que no se sienta concernido por el acuerdo presupuestario".
Si el objetivo, o uno de ellos, es, dado el desencuentro reiterado y permanente con Podemos, atraer a Ciudadanos, PP e IU al bando al menos de la abstención, ayer el Gobierno percibió pasos al encuentro de los tres votos naranja. Esquivando la valoración sobre la posibilidad de un acercamiento al PP, Lastra celebró la "actitud positiva y constructiva" de Ciudadanos en un encuentro en el que la delegación naranja bajó a la arena de la propuesta concreta y aprovechando los 23 millones de euros adicionales que otorga al Gobierno la elevación de una décima en el objetivo de déficit para 2017, pero no sólo, presentó una batería de condiciones en un clima que el portavoz del partido de Rivera, Nicanor García, retrató como "cordial y de posible entendimiento".
El Ejecutivo y el PSOE se comprometieron a buscar el encaje presupuestario, en los márgenes limitados que quedan, de una oferta de mejora para un presupuesto que Ciudadanos sigue considerando "continuista". Se sustancia, detalló García, en el perfeccionamiento del uso de los recursos públicos, de la eficiencia en el gasto y de la inversión. En concreto, en la extensión de la red de escuelas para menores de tres años, en "focalizar el esfuerzo presupuestario en la atención primaria para evitar el colapso en las urgencias por derivación", en potenciar la hospitalización a domicilio, mejorar la red de carreteras y las sedes judiciales o elevar la inversión en investigación y desarrollo.
