El Principado mantiene sin ocupar 229 plazas en residencias geriátricas públicas y reconoce planes para borrar de esa lista 152 camas el año que viene. La gerente del organismo autónomo Establecimientos Residenciales para Ancianos (ERA), Graciela Blanco, justifica las prioridades de ocupación en la demanda, materializada en la lista de espera de cada comarca, y precisa que el área con mayor número de aspirantes, la de Oviedo y Gijón, sí tiene sus geriátricos públicos, los cuatro de la capital y los tres de Gijón, a plena capacidad.

El inventario de camas libres, objeto de crítica particularmente audible desde la bancada de Podemos, que reprocha al Gobierno que tenga vacantes en residencias públicas mientras concierta plazas en las privadas, concentra casi el 65 por ciento de los sitios vacíos en tres establecimientos. El nuevo centro de Riaño (Langreo) abrió este año con cuarenta de sus 118 plazas en servicio, a menos de media carga, y los del Nodo, en Avilés, y Moreda (Aller) mantienen, respectivamente, 36 y 34 camas disponibles y sin ocupantes.

El año que viene, los planes del ERA dan prioridad a aproximar al lleno los geriátricos del Nodo, que tiene capacidad para 148 personas, y Moreda, que puede llegar a 59. Se decide qué se pone en servicio según la demanda, argumenta Blanco, y se descarta por el momento Riaño, cuyo compromiso de ocupación plena abarca toda la legislatura, en atención al mismo criterio de la lista de espera, apenas treinta plazas en la comarca del Nalón por las 150 de la del Caudal. Tampoco, por idénticas razones, la Consejería prevé llenar a corto plazo el alojamiento para ancianos de Lastres, que también mantiene libres diez de sus cincuenta plazas.

Blanco desmenuzó en la Junta el balance de ocupación de las residencias a su cargo a preguntas de IU. Durante su comparecencia para informar sobre el proyecto de presupuestos de su departamento para 2017, la consejera de Servicios y Derechos Sociales, Pilar Varela, añadió a estas 152 nuevas plazas públicas otras cincuenta concertadas que redondearían su propósito de abrir el año que viene 202 camas nuevas que tienen capacidad para generar 58 empleos, en su mayoría de auxiliares de enfermería y enfermeros.

Mientras Podemos volvía a criticar en la Junta la "política privatizadora" del ERA y los 38 millones que el proyecto de cuentas del Gobierno reserva para plazas concertadas, los responsables de la Consejería trataban de hacer valer el incremento de plazas públicas a disposición de los usuarios en el ejercicio que están a punto de cerrar. Se abrieron 172, expuso Graciela Blanco, cuarenta en Riaño, Lastres, el Nodo y Castrillón y las doce restantes en la residencia Aurora Álvarez de Gijón.