La Federación Socialista Asturiana (FSA) se comprometió ayer con el comité de empresa de la Fundación Metal a hacer todo lo posible para evitar el cierre de la entidad, en preconcurso de acreedores desde el pasado mes de octubre.

Los representantes de los trabajadores han iniciado una ronda de contactos con los grupos con representación en el Parlamento regional para pedirles su ayuda para sacar adelante la institución, pendiente de aplicar un duro plan de viabilidad y reestructuración que conllevará despidos.

Los primeros de esta ronda de contactos han sido Jesús Gutiérrez, secretario de organización de la FSA, y el exsenador José Antonio Alonso. Según explicó Marcelino García, presidente del comité de empresa de la Fundación Metal, ambos les trasladaron "que harán todo lo posible para ayudar a la entidad, porque consideran imprescindible que continúe con su labor y la función que realiza".

El dirigente sindical también explicó que la ronda de contactos con los grupos políticos tiene el objetivo de buscar su apoyo para, "teniendo en cuenta la importancia de la fundación, apoyen aquellas iniciativas de financiación encaminadas a salvarla, evitando su cierre".

La Fundación Metal tiene de plazo hasta el mes de febrero para aplicar su plan de ajuste, que incluye un expediente de regulación de empleo y conseguir un acuerdo con los acreedores para aplazar las deudas hasta que consigan el dinero correspondiente a los cursos que la Administración había comprometido y luego paralizó.