La mejora de la conectividad internacional, con enlaces a grandes centros europeos de distribución de vuelos ("hubs"), y bajo coste "punto a punto". Estas son las dos claves que ofrecen los expertos para que el aeropuerto de Asturias consolide ese proceso de recuperación de los cientos de miles de pasajeros perdidos a partir del desplome de 2013 que se aprecia desde la entrada en servicio de los nuevos enlaces con Londres y del abaratamiento de los billetes a la capital de España.
Con la conexión británica cubierta desde la pasada primavera, los empresarios urgen ahora una mejora del enlace con París que no ven suficiente con el anuncio de que Vueling ofrecerá un tercer vuelo semanal a partir de la próxima primavera. "Hay que insistir en el regreso de Air France al corredor para mejorar las conexiones", subraya Íñigo Fernández, responsable de la asociación de Operadores Turísticos y Agencias de Viajes de Asturias, que también apuesta por la apertura de enlaces con Roma o Milán.
A la hora de plantear otras rutas, los expertos colocan entre las prioridades la apertura de un enlace con Amsterdam de las aerolíneas KLM o Transavia, por la gran conectividad que ofrecería, así como la puesta en marcha de corredores a Düsseldorf, Fráncfort o Berlín a cargo de la compañía Lufthansa o de su filial Eurowings. "Una región como Asturias no puede depender de Santander para rutas internacionales básicas", afirma Jorge García, responsable de "Aeroasturias", que también aboga por el regreso al Principado de Ryanair, principal aerolínea de bajo coste del mundo. A su juicio, "dinamizaría destinos internacionales, con billetes baratos y altas ocupaciones, y afianzaría a Asturias en el mercado internacional".
El de Asturias es, junto a los de Bilbao y La Coruña, el único aeropuerto español con más de un millón de viajeros anuales que no dispone de vuelos de Ryanair. La compañía operó en Santiago del Monte con unos enlaces a Madrid, Barcelona y Canarias que lograron unos notables índices de ocupación.
Sin embargo, pocos meses después de anunciar su intención de ampliar su cartelera en la terminal con vuelos a países escandinavos, Ryanair decidió dejar el Principado en 2013 dentro de un proceso general de repliegue en España y entre quejas por el escaso interés que habría demostrado el Ejecutivo regional en su permanencia.
En el ámbito nacional, los expertos sostienen que las prioridades pasan por mantener y ampliar la actual oferta a Madrid con más servicios de Iberia Express, la filial de vuelos baratos de Iberia, y conseguir competencia para Vueling en la conexión con Barcelona-El Prat. El resto de destinos nacionales del aeropuerto se consideran razonablemente bien cubiertos, aunque los operadores de viajes estiman necesario evitar que se produzcan solapamientos entre rutas y compañías.
