La contaminación remite en Asturias por la lluvia, aunque la calidad del aire es regular en Lugones, La Felguera, Llaranes y Sama. Los niveles de partículas en suspensión y de benceno han caído notablemente en las últimas horas en todas las estaciones medidoras de la red oficial de la consejería de Medio Ambiente. La región registrará a lo largo del día abundantes precipitaciones, que irán a más mañana. La borrasca, que limpiará la atmósfera de contaminantes, llega tras diecinueve días de sequía.

Por la mañana había tres estaciones (Lugones, La Felguera y Trubia) con mala calidad del aire y otras cuatro con niveles altos de contaminación. Lugones registra valores todavía altos de partículas de tamaño inferior a 10 micras (PM 10) y a 2,5 (PM 2,5). La Felguera está en alerta por micropartículas (PM 2,5) mientras que en Trubia ha disminuido el benceno. Por su parte, Matadero y Llaranes en Avilés y Sama en Langreo dan positivo en partículas y benceno. Los valores están en continuo descenso, por lo que en las próximas horas las estaciones pueden salir de la alerta.