Asturias planta cara a Madrid ante la reforma del sistema de financiación autonómica. El presidente del Principado, Javier Fernández, y la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, dieron réplica ayer la pretensión de su homóloga madrileña, Cristina Cifuentes, que reclamó más recursos para su comunidad, "la que más recauda y la más solidaria del país". Polémicas al margen, la delegación del Principado salió satisfecha de la Conferencia de Presidentes, que se celebró ayer en el Senado, porque ha conseguido el reconocimiento por parte del Gobierno central de que el reto demográfico, la despoblación, que presenta proyecciones "dramáticas" para Asturias y todo el Noroeste pase a ser objeto de una estrategia estatal, vital para ir a Europa a reclamar ayudas.

En una cumbre marcada por acuerdos de partida que ya venían trillados de las comisiones preparatorias, el debate sobre la financiación autonómica puso de manifiesto la existencia de discrepancias e intereses contrapuestos. La controversia llegó después de que Cristina Cifuentes se quejase de las diferencias existentes en la financiación per cápita entre las distintas comunidades y reclamase una mejora para Madrid. "Somos la región más solidaria con el conjunto nacional, aportamos el 78 por ciento de los recursos al Fondo de Garantía de los Servicios Públicos Fundamentales", esgrimió la presidenta madrileña, quien puso cifras a su planteamiento. Madrid aportó el pasado año 3.248 millones de los 4.175 que ponen las comunidades autónomas que son contriubuyentes netos.

Javier Fernández rebatió esa postura y contestó que la clave de bóveda de la financiación debe partir "del coste de la prestación de servicios y no de lo que se recauda en una comunidad, porque entonces puede flotar en el ambiente la idea de que las autonomías ricas quieren transferir menos". El presidente asturiano no puso cifras en su réplica pero sí un ejemplo muy concreto: "La recaudación de los impuestos del Estado en Madrid es mayor que en cualquier otra parte de España, porque, entre otras cosas, la renta en Madrid es de 32.000 euros por habitante, el doble de Extremadura, que tiene la más baja. Pero los costes de prestación de servicios de Extremadura son más altos que en Madrid", indicó Javier Fernández. La posición que defenderá Asturias en esta negociación, que ayer sólo dio sus primeros pasos, es que "cada comunidad autónoma debe exigir tener unos costes suficientes para mantener un estandar de servicio, independiente de la recaudación que pueda tener de los impuestos del Estado. En el fragor de la batalla dialéctica, Javier Fernández y Susana Díaz reprocharon a Cristina Cifuentes que pretendiera mejores servicios, por esa mayor recaudación de los impuestos estatales en Madrid y, en cambio rebajara los impuestos autonómicas. La polémica está servida y tendrá nuevos capítulos. Por ejemplo, la presidenta balear, Francina Armengol, reclamó el principio de ordinalidad en la futura financiación, esto consiste en que, en las autonomías que recaudan más, el gasto en los servicios públicos sea mayor, un planteamiento en el que tampoco está de acuerdo Asturias, que se juega el 70 por ciento de su presupuesto para sostener los principales servicios públicos.

De momento, el acuerdo posible a cuenta de la reforma de financiación regional consistió en la creación de un grupo de expertos, que deberá estar listo en un mes para que planteen sus propuestas para la mejora del modelo vigente, aprobado en 2009.

El mayor logro para Asturias de la Conferencia de Presidentes fue la asunción por parte del Gobierno central de que "el problema demográfico y la despoblación pasen a ser un problama de Estado", según destacó Javier Fernández en la rueda de prensa posterior a la cumbre que tuvo lugar en el Senado. "En Asturias tenemos una demografía que a largo plazo puede entenderse dramática", subrayó el presidente del Principado, quien apuntó la necesidad de "revertir esa situación, mediante políticas coordinadas, porque estamos muy lejos de la tasa de reposición".

La dependencia

El presidente asturiano está convencido de que esa nueva estrategia, de ámbito estatal, para frenar el declivwe demográfico que afecta por igual al Noroeste y también a otras comunidades, como Aragón, "trascenderá también a las políticas europeas". De momento, la Presidencia del Gobierno ya ha manifestado su disposición a organizar una reunión, la próxima semana, a la que serán convocados dos comunidades gobernadas por el PP, Castilla y León y Galicia, y otras dos de signo socialista, Asturias y Aragón, para diseñar una nueva política. Fernández mencionó que países, como Francia, "consiguieron revertir sitaciones similares".

La financiación de la dependencia fue otra de las cuestiones que también sacaron varios de los quince presidentes autonómicos que acudieron a la cumbre, todos excepto el catalán y el vasco. En esta cuestión la sintonía con Madrid es mucho mayor. Cifuentes se quejaba ayer de que su comunidad autónoma corre "con el 84 por ciento del gasto, frente al 16 por ciento que pone el Estado". El consejero de Presidencia asturiano, Guillermo Martínez, que participó en los trabajados preparatorios de la Conferencia, señala que Asturias pone cinco veces más dinero que el Estado en la financiación de las políticas de Dependencia. El Gobierno central se compromete incorporar esa ley a la futura financiación.