La Audiencia Provincial de Oviedo decidirá en breves fechas si continúa en prisión provisional o debe salir en libertad el hombre condenado a 32 años de prisión por apuñalar a su mujer y a una amiga delante de su hija de ocho años, enferma y a la que también llegó a amenazar con cortarle el cuello.

La vista se celebró ayer en la sección tercera de la Audiencia Provincial de Oviedo, donde tanto la Fiscalía como las acusaciones particulares rechazaron de plano la solicitud de concesión de la libertad hasta que se dirima el recurso presentado por la defensa contra la condena de 32 años de cárcel.

Según la legislación vigente, una vez que se han cumplido dos años de prisión provisional, el acusado puede quedar en libertad si no se decreta una prórroga.

La sentencia ahora recurrida revela que, según el juez, se dan las dos circunstancias necesarias para considerar que Juan Ramón S. V. , de 47 años, cometió dos intentos de asesinato, ya que tenía la clara intención de matar y además hubo alevosía o carácter sorpresivo del ataque.

El acusado había afirmado en el juicio que él había sido atacado primero por su exmujer y que ya no recordaba nada más de aquel episodio. También alegó que tomaba tranquilizantes y ansiolíticos.

La sentencia ahora recurrida remarca sin embargo que Juan Ramón S. V. presenta el perfil de un maltratador machista que no logró superar la ruptura con su pareja.

El acusado no se veía así. De hecho, en el derecho a la última palabra que el tribunal le concedió en su juicio para defenderse, concluyó clamando: "Quiero seguir siendo el superhéroe que era para mi hija. Siempre fui un buen padre".