La población de jabalíes ha crecido en Asturias un 719 por ciento en el periodo de treinta años que va desde 1981 al año 2011. Así lo expuso ayer el director general de Recursos Naturales, Manuel Calvo, durante la charla que ofreció a los alumnos del instituto de Luces, en Colunga. Calvo habló de un "espectacular aumento" de la especie no sólo en la región, sino también en España y en Europa.

No al mismo ritmo que la población, pero también han aumentado las capturas: un 7 por ciento anual en ese periodo de tiempo y un 217 por ciento entre los años 2010 y 2015. En total, en los primeros quince años del siglo se autorizaron en Asturias 97.645 cacerías en las que se abatieron 116.537 jabalíes.

Se trata de una especie, explicó Calvo, que alcanzó su "mínimo histórico" en la región a mediados del siglo XIX pero que a mediados del veinte inició un crecimiento "explosivo". En la actualidad se calcula que hay en Asturias unos 60.000 individuos, con un margen de error de 7.000 arriba o abajo. Están presentes en todos los concejos salvo en Gozón y se han expandido "de la montaña a los valles y a la costa de una forma exponencial", describió el director. La zona del centro al Oriente de la región concentra la mayor población de Asturias, en la que el jabalí "mantuvo históricamente sus poblaciones".

En los concejos de mayor densidad, señaló Calvo, hay unos once jabalíes por kilómetro cuadrado, algo que sucede por ejemplo en Llanes. El responsable de Recursos Naturales presentará hoy en Mieres el programa de prevención de daños y control del jabalí que el Indurot ha elaborado a raíz del problema que existe, sobre todo en las zonas urbanas, con la proliferación de esta especie.