"Las condiciones del túnel de Priañes fueron claves en la muerte del matrimonio de Tineo en septiembre de 2015. De hecho, las mejoras que se tenían que haber realizado antes del 30 de abril de 2014 no se hicieron hasta después de ese fatal siniestro". Así de rotundo se expresó el presidente de la Asociación Española de Investigadores de Accidentes de Tráfico, Juan González-Carbajal, tras realizar un exhaustivo informe de las causas del accidente y en el que concluye que el Principado es "corresponsable de esas muertes". El conductor que provocó el accidente aceptó esta misma semana una condena de cuatro años de prisión, aunque se alegarán motivos de salud para evitar su ingreso en la cárcel. El túnel de Priañes fue construido con un apartadero que conllevaba una esquina sobresaliente y sin medidas de seguridad, lo que provocaba que los vehículos que colisionaran contra ella no pudieran redireccionarse hacia la vía. Y eso fue lo que pasó en aquel fatídico septiembre de 2015.
El siniestro se produjo cuando el conductor de una furgoneta se dispuso a adelantar al matrimonio y, supuestamente por exceso de velocidad y quizás cansancio, les golpeó en la parte izquierda posterior del coche, provocando que colisionaran violentamente contra la pared del túnel. "El problema fue que chocaron contra la esquina de la estructura del apartadero, que atravesó el coche por uno de los laterales. Eso fue lo que provocó los fallecimientos. Si no hubiera estado ahí esa estructura, se hubieran golpeado contra las paredes del túnel, pero casi seguro que no se hubieran producido muertes", insistió González-Carbajal.
