Francisco Álvarez-Cascos y Segundo González se encontrarán en el Juzgado. A la tercera, después de que el exvicepresidente del Gobierno no compareciera ni en el acto de conciliación de noviembre ni en la audiencia previa de ayer, el 15 de marzo se cruzará en el juicio con el diputado de Podemos al que ha demandado por faltar a su honor al relacionarle sin pruebas con la trama "Gürtel". La fecha de la vista por la demanda de protección del honor planteada por Álvarez-Cascos quedó fijada ayer en el Juzgado de instrucción número 10 de Oviedo y después de conocerla, el parlamentario de la formación morada se reafirmó en los indicios que motivaron la expresión de su sospecha y la posterior demanda de Álvarez-Cascos.

Trazando vínculos entre sus declaraciones sobre el exministro de Fomento y la difusión, a finales de la semana pasada, de la investigación de la Guardia Civil sobre presuntas irregularidades en torno a los sobrecostes de la obra de la Variante de Pajares, González perseveró que él sólo se hizo eco de sospechas policiales ampliamente difundidas en los medios de comunicación y quiso expresar su perplejidad a la vista, dice, de que "quienes denunciamos estas chapuzas y presunta corrupción tengamos que ir a juicio por sospechar lo que en su momento sospechó la UDEF", la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía.

"No nos van a callar con demandas", finalizó el parlamentario de Podemos, que defiende sus afirmaciones respecto a Álvarez-Cascos por ser la suya una conjetura "ampliamente conocida" y profusamente divulgada en los medios de comunicación.

El exvicepresidente, fundador y secretario general de Foro Asturias, entiende que las acusaciones sobre sus vínculos con sobresueldos en "B" son "difamatorias, calumniosas e injuriosas".