Atasco legislativo en el parlamento asturiano, que acumula 34 proyectos y proposiciones de ley en los menos de dos años que van de legislatura. Esta acumulación de proyectos y de proposiciones legislativas ha abierto un nuevo frente entre el Gobierno y la oposición que reconocen la necesidad de establecer prioridades pero se acusan de ser los responsables del colapso.
"No hay días suficientes", argumentan los portavoces para compaginar la tramitación que requiere todo proyecto legislativo con las comisiones ordinarias y de investigación y la celebración de los plenos, que ocupan los jueves y los viernes. "Hay leyes, como la del Deporte, para las que se piden 90 comparecientes", puso de ejemplo el portavoz socialista Fernando Lastra, quien advirtió la necesidad de establecer un régimen de prioridades, para cuestiones que requieren un plazo más rápido, como la ley de endeudamiento de 23 millones.
La presidenta y portavoz del PP, Mercedes Fernández, atribuyó el atasco a "la rebeldía parlamentaria" de un Gobierno que con 14 diputados "hace caso omiso de los acuerdos del Parlamento". Según la dirigente popular, esa estrategia del Ejecutivo socialista obliga a los partidos de la oposición "a elaborar con gran esfuerzo proposiciones de ley, porque la legislación se publica en el BOPA y es de obligado cumplimiento". Emilio León, de Podemos, cargó contra "la soberbia aislacionista del PSOE" mientras que Cristina Coto, de Foro, también señaló como "responsable claro" de esa acumulación legislativa al Gobierno socialista y puso de ejemplo la lentitud en su tramitación de la ley de Transparencia. En cambio, Gaspar Llamazares (IU) destacó que "por querer abarcar mucho nos podemos quedar un año más sin elaboración legislativa" y abogó por establecer prioridades "para que el trabajo sea efectivo" y Nicanor García, de Ciudadanos, también se decantó por la necesidad de llegar "a un acuerdo de autorregulación".
