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Una "historia de éxito": de cómo el turismo activo cambió la economía del bajo Sella

Un estudio constata que en 25 años de actividad la comarca fija población y gana renta por encima de la media regional

Una "historia de éxito": de cómo el turismo activo cambió la economía del bajo Sella

El curso bajo del Sella arrastra desde hace un cuarto de siglo "una historia de éxito" que esperaba ser contada. Contada en el relato, pero sobre todo con los números que explican cómo las canoas que tapan el río en temporada alta, y en general la pequeña industria del turismo activo, han colaborado en la transformación de la economía de la zona, ha contenido la hemorragia demográfica que se agrava en Asturias, ha hecho progresar la renta, ha modificado los nichos de empleo y ha modelado una actividad próspera capaz de aprovechar los propios recursos remolcando la renovación económica de la comarca en la que se desarrolla. Un trabajo de fin de grado en Comercio y Marketing, "Impacto socioeconómico de las empresas de turismo activo en el valle del Sella", cuenta esta historia triunfal midiendo la evolución de Parres, Cangas de Onís y Ribadesella desde que en 1991 nacieron los descensos fluviales recreativos y comparándola con la del resto del Oriente y con la de Asturias, llegando a conclusiones altamente reveladoras de cómo una actividad que se desarrolló sola y a veces en contra de las restricciones administrativas ha terminado por consolidarse y cooperar decisivamente con el resto del sector turístico en el remolque de la economía de su contorno.

Firmado por Marcos Alonso bajo la tutoría de la profesora María Elena Ceniceros, calificado con Matrícula de Honor por el tribunal de la Facultad de Comercio, Turismo y Ciencias Sociales Jovellanos, el estudio resuelve que en los tres concejos analizados la renta ha crecido desde 1991 por encima de la media de Asturias, que la población ha caído menos y que se ha generado un fuerte y saludable trasvase del empleo desde el sector primario al de servicios, perdiendo también por el camino proporcionalmente menos industria y construcción que el resto de la región. No todo es obviamente culpa del turismo activo, pero la hinchazón que ha experimentado esta actividad hasta dar para 36 empresas en tres pequeños concejos justifica con creces un análisis de su aportación. Estamos, dice el autor, ante "el mayor polo del sector en España", "ante la mayor concentración de empresas del país en una zona tan pequeña", ante una actividad de crecimiento rápido que a finales de 2015 daba para 36 empresas sólo en tres concejos de tamaño humilde y con extraordinario valor sobrevenido de locomotora económica para su pequeño entorno físico.

El trabajo ha visto cómo tres municipios de la Asturias demográficamente menos próspera perdían sólo un 1,44 por ciento de sus habitantes en un periodo (1996-2015) en el que se aceleraba la concentración de la población asturiana en el centro urbano, la región en su conjunto caía un 4,1 y el resto del Oriente, casi diez veces más que ellos, un 10,8. El análisis ha observado también que la renta familiar disponible por habitante ha progresado en los tres concejos de 1990 a 2012 catorce puntos por encima del promedio de Asturias, doce más que Gijón y hasta 38 por delante de Oviedo.

Mención aparte merece el empleo. A la estela de las canoas que bajan el Sella, complemento cada vez más potente de la muy desarrollada actividad turística de la zona, la economía de la ribera ha ido virando hacia una dieta productiva mucho más escorada a los servicios. Tanto que el porcentaje de trabajos terciarios ya se aproximaba en 2012 a las tres cuartas partes del total, a un 74 por ciento que casi clava la media de Asturias, que apenas llegaba al 55 en 1998. La evolución ha sido aquí llamativa, resultado de una rápida transición poco frecuente en los concejos de las alas del Principado desde un modelo económico con fuerte peso de la agricultura y la pesca a otro donde ya dominan abrumadoramente los servicios. Empezando a contar desde 1998, Parres, Cangas de Onís y Ribadesella han visto menguar el peso laboral del sector primario en un 15,5 por ciento, bastante más del doble que en el conjunto de la región, y crecer en un significativo veinte el del terciario, cinco puntos más que en toda esta Asturias cada vez más enfocada a los servicios. Lo ha hecho, además, sin dejar atrás la industria y la construcción, que en esta zona viven en su medida también a la sombra del turismo y que en términos de empleo ha perdido terreno en un nivel sensiblemente inferior al de la media asturiana. La conversión de lo primario en terciario también se ve cuando se observa que el aporte de éste a la economía de los tres concejos, su valor añadido, progresó diez puntos porcentuales de 1998 a 2012.

Eso es casi todo turismo, o negocios que gravitan alrededor del turismo, entre ellos el efecto difundido de esta actividad de floración rápida a la que se le calculan en la comarca 26 empleos fijos y al menos otros doscientos eventuales en función de la época, si bien esta clase de ocio empieza a crecer cada vez más fuera de los márgenes de la hinchazón turística del verano. El estudio cifra en cerca de un millón de euros la facturación declarada sólo de diez empresas, las constituidas como sociedad limitada -y por tanto obligadas a presentar cuentas anuales-, pero menciona el lastre de "un alto índice de economía sumergida".

Para calibrarlo, efectúa una estimación de ingresos calculándolos según el número de embarcaciones de que dispone cada empresa -en total, más de 2.000-, los días medios de actividad al año y una tarifa estándar de veinte euros. El estudio adjudica así al sector una facturación estimada que iría de casi dos millones de euros en un escenario de ingresos pesimista a 3,5 en un contexto más próximo a lo que podría ser la realidad. Pero aun puede ser más, toda vez que esta operación tiene en cuenta en exclusiva los ingresos por alquiler de canoas, sin considerar la multitud de actividades en las que se ha diversificado el turismo activo en el Oriente asturiano y que podrían hacer crecer esa cifra hasta una muchísimo mayor.

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