Villa tendrá que decir a la juez en qué facturas y transferencias le han falsificado la firma, tal como indicó en su declaración del pasado viernes, y los motivos por los que impugna esos documentos. La magistrada Simonet Quelle Coto, que instruye la querella del SOMA contra Villa por apropiación indebida de 420.000 euros, ha dado un plazo de tres días para que se realice ese requerimiento, y ha solicitado al ministerio público y a las diferentes partes personadas que se pronuncien sobre este extremo, antes de decidir si acepta incorporar a la causa el cuerpo de escritura realizado por el ex secretario general del sindicato minero después de su declaración de casi dos horas.

José Ángel Fernández Villa fue bastante explícito en su declaración sobre la cuestión de las firmas. Aseguró que algunas de ellas no las había hecho él, sino una persona muy amañada. Con ello apuntaba directamente a su exsecretaria, Carmen Blanco, y al excontable del SOMA, Juan Cigales. La estrategia de Villa parece haber cambiado desde que su defensa se dio cuenta de que ya no podía eludir la declaración ante la jueza. De tratar de demostrar que Villa era inimputable y que no podía siquiera presentarse en el Juzgado, ha pasado a tratar de deslizar la responsabilidad al servicio de contabilidad y administración del sindicato. Según los que sugirió Villa, las dietas del comité intercentros las cobraron los sindicalistas y hay gastos que no fueron realizados por él. No obstante, los letrados del SOMA creen que la instrucción podría estar cercana a su fin.

A nivel político, la declaración de Villa ha motivado varias reacciones. Para Podemos, Ciudadanos e Izquierda Unida (IU), se ha demostrado que el exsindicalista estaba en condiciones de declarar y que su estado de salud no presenta un deterioro tan avanzado como para impedirle dar explicaciones.

El portavoz de Podemos, Emilio León, aseguró que las palabras de Villa ante la juez responden a una "lógica de clanes" y que, en realidad, fueron aprovechadas por el otrora todopoderoso líder minero para "enviar mensajes a quienes compartían con él la fiesta de Rodiezmo, de la que nunca más hemos sabido". León se mostró convencido de que Villa "recuperará la memoria si ve amenazado su patrimonio".

Para Gaspar Llamazares, portavoz parlamentario de IU, la declaración del viernes pone en evidencia que el exsecretario general del SOMA "trataba de eludir la colaboración con la justicia", aunque "aún queda mucha tela por cortar". Sobre la negativa en redondo de Villa a comparecer en la Junta, admitió que "no esperaba mucho más" de él.

En cuanto a Ciudadanos, Nicanor García, portavoz en la Cámara autonómica celebró la declaración de Villa "tras haber estado mareando la perdiz durante año y medio" y reclamó una investigación a fondo sobre la gestión y el destino de las multimillonarias partidas asignadas a los fondos mineros para la reactivación económica y social de las Cuencas.

Interpelados por los periodistas, ni Mercedes Fernández (PP) ni Fernando Lastra (PSOE) se pronunciaron sobre esta particular a la conclusión de una Junta de Portavoces en la que se acordó que la comisión parlamentaria de investigación sobre los cursos de formación en Asturias arranque cuando concluyan las que están en marcha ahora en la Cámara, centradas en las listas de espera, los incendios forestales y el Gitpa.