La reforma de la ley que permitirá rebajar el impuesto de sucesiones en Asturias entra boxes. La consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, entregó el pasado viernes a la presidenta regional del PP, Mercedes Fernández, el borrador del texto elaborado en su departamento que recoge las rebajas pactadas a finales del pasado año, un acuerdo que resultó determinante para la aprobación del Presupuesto del Principado correspondiente a 2017.

La consejera de Hacienda tiene la intención de registrar el proyecto legislativo con la reforma del impuesto de sucesiones en la Junta General el próximo mes de abril, de ahí que ahora haya trasladado el borrador de la reforma al grupo parlamentario popular. La portavoz, Mercedes Fernández, y la diputada encargada del área económica chequearán el contenido del proyecto legislativo para comprobar la inclusión de los compromisos cerrados en diciembre del año pasado.

La principal novedad de esta modificación legal consiste en dejar libres del impuesto de sucesiones a los hijos, cónyuges o padres que hereden 300.000 euros. Hasta el pasado 1 de enero sólo estaban exentos los herederos de esos grupos (I y II) que percibían hasta 150.000 euros pero desde esa fecha el mínimo exento pasó a ser de 200.000 euros. El PP ha conseguido elevar dicha exención en cien mil euros más por heredero a cambio del apoyo al Presupuesto de 2017. "El PSOE es un forofo del impuesto de sucesiones pero le metimos una buena rebaja. Mi compromiso, si el PP gobierna en Asturias tras las próximas elecciones autonómicas, es la eliminación de dicho tributo pero nos pareció práctico, inteligente y sensato rebajarlo a la mitad", argumentó a este periódico Mercedes Fernández el pasado sábado, poco después de que una gijonesa que caminaba por el Paseo de Begoña le dijera que "hay que quitar el impuesto de sucesiones, pero de verdad".

El acuerdo alcanzado entre el Gobierno asturiano y el PP sobre la reforma de Sucesiones también incluye una modificación sustancial en el tratamiento fiscal de la vivienda habitual heredada. Hasta ahora los herederos tenían que pagar recargas adicionales si vendían la residencia familia, recibida en herencia, en un plazo inferior a 10 años; una vez que entre en vigor esta reforma acordada entre el PSOE y el PP, se podrá vender la vivienda en tres años sin tener que asumir por ello cargas adicionales. Además, esta segunda fase de la rebaja del impuesto de sucesiones también incluirá bonificaciones especiales en herencias de explotaciones agrarias, una medida que, por un lado podría favorecer el relevo generacional y, por otra parte, frenar el despoblamiento rural.

Aunque la tramitación de la nueva ley no tiene calendario, el PP asturiano tiene gran interés de que esta reforma legislativa se pueda aprobar antes de que concluya este período de sesiones, en julio próximo. El atasco legislativo existente en el parlamento asturiano no sopla precisamente a favor de las pretensiones de los populares pero el principal partido de la oposición confía en que la nueva ley entre en vigor en ese plazo.