El consejero de Empleo, Francisco Blanco, defendía en la Junta la pertinencia del decreto que regula el autocaravanismo y puso un ejemplo. Además de la necesidad de ordenar una actividad que como ésta ocupa el espacio público, argumentó en réplica a Ciudadanos que "existe una normativa de control de viajeros de plena obligación. Si no, estaríamos abriendo una vía al terrorismo imposible de controlar". Poniéndose en un escenario de plena libertad, afirma, "los terroristas se saltarían la normativa si vinieran en autocaravana. Podrían acampar donde quisieran sin registro y toda la legislación para el control de viajeros en hoteles u otros establecimientos quedaría anulada", adujo.