"Fue una figura de la Transición, una persona de la que tienen mucho que aprender los políticos, los médicos y los cristianos". El párroco del Corazón de María, el padre José Blanco, dedicó ayer esas palabras a Adolfo Barthe Aza en una homilía tan cálida como sentida por un referente de la vida política, cultural y social de Asturias.
El templo parroquial del Corazón de María quedó pequeño para acoger a la amplia representación social que quiso acompañar a la familia Barthe García de Castro, en la que había políticos de distintos partidos, algunos ya alejado de la actividad pública, médicos así como responsables de la Universidad de Oviedo y de entidades culturales como Amigos de la Ópera y el Centro Asturiano de Oviedo, entre otros. El padre Blanco destacó el carácter "honesto, íntegro y austero" de Adolfo Barthe Aza, una persona "creyente y practicante que dejó huella".
Hasta la iglesia, ubicada en el centro de Oviedo, se acercaron el Delegado del Gobierno en Asturias, Gabino de Lorenzo y su mujer, Rita Mari Álvarez; el alcalde de Oviedo, Wenceslao López, que había sido compañero de tertulia radiofónica de Barthe; la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón. También asistieron al funeral la presidenta de Foro, Cristina Coto, y el diputado autonómico, Pedro Leal; el portavoz de Ciudadanos en la Junta General, Nicanor García, el exconcejal ovetense Avelino Martínez, el actual "número dos" en el ayuntamiento de Gijón, Fernando Couto; la concejal ovetense Ana Rivas; la exconcejal Begoña Pérez; el exsenador y catedrático José María Casielles Aguadé y el expresidente de la Junta General, el letrado Antonio Landeta.
La impronta de Adolfo Barthe Aza, que fue el primer presidente del patronato de la Fundación Príncipe de Asturias, en la vida cultural y social de la región, se dejó sentir en la amplia relación de asistentes al funeral, al que acudió el actual rector de la Universidad, Santiago García Granda, y los exrectores Juan Vázquez y Juan Sebastián López Arranz; el neumólogo y expresidente de Amigos de la Ópera de Oviedo, Jaime Martínez; el presidente del Centro Asturiano de Oviedo, Alfredo Canteli; el pintor Manolo Linares; la catedrática Josefina Martínez; los periodistas Juan de Lillo, Luis José de Ávila y Carlos Rodríguez y el abogado y poeta José Heradio González Cano y el expresidente de la FADE, Severino García Vigón. También acudieron al funeral numerosos compañeros de la profesión médica, como el pediatra Eduardo Ramos y Eloína Fernández, la esposa del exalcalde Antonio Masip.
