Genestoso se despertó ayer bajo una fina capa de nieve. Durante todo el invierno, el pueblo cangués situado a unos 1.200 metros de altitud apenas disfrutó de la visión de postal que la nieve deja en sus montes debido a las elevadas temperaturas y los numerosos días de sol que se registraron en la región en los últimos meses.

Para hoy, la previsión meteorológica avisa de riesgo de nevadas en el Suroccidente y en Picos de Europa con cotas que bajarán hasta los 400 metros. La AEMET anuncia fenómenos costeros para todo el litoral asturiano. Actualmente es necesario el uso de cadenas en diez puertos de la red viaria asturiana.

Ahora, recién estrenada la primavera, la nieve, que ha impuesto el uso de cadenas en doce puertos de la red viaria asturiana, llega al pueblo. Algo que no sorprende en Genestoso, que han vivido nevadas en pleno mes de mayo. Sin embargo, saben que en esta época la cantidad de precipitación y su permanencia no es comparable a la del invierno y creen que el anuncio de nevadas para estos días no causará grandes inconvenientes.

"No nevó tanto como se esperaba, estamos en marzo y ahora es difícil que se mantenga", explica Modesto Fernández que es de los que considera necesario que haya al menos una gran nevada al año. "Nos conviene que nieve para el campo, para evitar la escasez de agua y para que vengan esquiadores", apunta. Su vecino Eduardo Rodríguez recuerda que muchos pueblos de zonas bajas ya se han quedado sin agua "y aquí, comparado con años anteriores, vemos que hay menos cantidad", subraya.

No obstante, los de Genestoso reconocen que a pesar de estar acostumbrados, la nieve es un engorro para las personas que tienen que ir a trabajar o para los estudiantes. "Es algo que temo, coger el coche cuando el tiempo está así, en ese sentido este invierno fue tranquilo y se agradece", añade Noelia Menéndez.

Ayer la temperatura en el pueblo cangués no superó los cero grados y durante todo el día se sucedieron nevadas intermitentes que cubrían momentáneamente de blanco caminos y carretera. Una situación que se repetía en toda la zona del Suroccidente donde la nieve se quedó por encima de los 1.000 metros de altitud, provocando que los puertos de Leitariegos, Cerredo y Connio estuviesen indicados para vehículos con cadenas. Aunque los copos blancos se pudieron ver en cotas más bajas, pero sin cuajar. Nevó en las estaciones de esquí.