El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha logrado en Galicia lo que no consigue en Asturias: desbloquear un proyecto adjudicado a la constructora Dragados, la misma que se niega a instalar las vías en la Variante, que amenazaba con generar graves retrasos en las obras del AVE de la comunidad vecina.

En concreto, el conflicto se localizó en un tramo de 2,3 kilómetros de longitud, ubicado entre las localidades orensanas de Portocamba y Cerdedelo, paralizado por Dragados y Tecsa, ambas del grupo de Florentino Pérez. El tramo se había adjudicado con una baja del 25% respecto al presupuesto base de licitación y las empresas, en desacuerdo con la técnica constructiva para ejecutar dos viaductos, decidieron detener los trabajos en la zona.