Maniobra a la desesperada de José Ángel Fernández Villa para evitar sentarse en el banquillo, cuando está a punto de finalizar la instrucción de la querella presentada por el SOMA. La Fiscalía estudia la solicitud de incapacidad civil solicitada el martes de la semana pasada por la familia del exdirigente sindical, según aseguró ayer la Fiscal Superior de Asturias, Esther Fernández, antes de participar en un debate sobre la ley de enjuiciamiento criminal en el Colegio de Abogados de Oviedo. La responsable de la Fiscalía asturiana indicó además que ha sido nombrado un fiscal instructor, que decidirá si archiva la petición o presenta una demanda de modificación de capacidad ante el Juzgado civil correspondiente.
La solicitud de incapacidad podría ser una nueva maniobra de Villa para eludir sentarse en el banquillo, una vez que han fallado todos los intentos por evitar que prestase declaración y la juez comprobase que estaba en condiciones de ser sometido a juicio, tal como sostiene el SOMA. Los letrados de este sindicato minero descartan que una hipotética declaración de incapacidad impida que pueda ser sometido a juicio por actos supuestamente cometidos cuando estaba en plenitud de capacidades.
El SOMA, que reclama a Villa la cantidad de 420.000 euros que cobró su exdirigente procedentes de las dietas del comité intercentros de Hunosa y otros conceptos, considera que la declaración del exsindicalista, que tuvo lugar el pasado 3 de marzo, ha despejado cualquier duda sobre su estado de salud. Y es que, como indicó el neurólogo Alfredo Robles Bayón, aunque presenta un deterioro cognitivo evidente, eso no le impide recordar cosas del pasado, como se comprobó en su declaración.
Gastos en sidrerías
La petición llega cuando el Juzgado número 2 de Oviedo está a punto de cerrar la instrucción. La Audiencia deberá dilucidar los últimos recursos presentados por Villa, pero la conclusión podría dictarse antes. Además, el martes que viene, Pedro Castillejo declarará de forma voluntaria ante la juez Simonet Quelle Coto, a las nueve de la mañana. Se presume que aportará datos de los ingentes gastos en sidrerías que le imputa el SOMA, unos 118.000 euros, aunque en la querella figuran por el momento 70.000.
