El PP exigió ayer el cese de las hostilidades del Gobierno del Principado contra la enseñanza concertada, que eso y no otra cosa es, a la vista del diputado popular David González Medina, el anuncio de recorte de 32 aulas en la red para el próximo curso. Requiriendo del Ejecutivo socialista la "revisión inmediata" de su "estrategia de ataque a la concertada", el parlamentario popular expone el rechazo de su grupo a la decisión de la Administración educativa y a sus razones, las demográficas. Medina interpreta la decisión como una vuelta más alrededor de las agresiones del Principado a estos colegios y exigió que la propuesta "impuesta" se negocie con el sector y los grupos políticos y se flexibilicen los criterios de actualización de unidades docentes. Sólo con bajar de 25 a 23 la ratio de alumnos por aula en educación Infantil para equipararla a la de la red pública, "diez de esas unidades suprimidas se salvarían" afirma el diputado, que precisa que el PP no se conformaría de entrada con aminorar la pérdida a 22.

"El PSOE lleva en su ADN el odio a la concertada", afirma el parlamentario, que denuesta un recorte de aulas que viene "impuesto", sin negociarlo previamente "ni con la patronal, ni con los sindicatos, ni con las familias ni con los grupos políticos", y "cobarde", porque afecta sobre todo "a centros pequeños y a zonas muy castigadas demográfica, económica y socialmente".

El diputado y número tres del PP regional revolvió los argumentos de su partido a favor del "sagrado derecho de las familias a elegir libremente el centro y el modelo educativo que desean para sus hijos" y se colocó enfrente de los "ataques" que la concertada ha recibido de la Consejería de Educación.

Desde "la lluvia fina del Consejero con aquello de que el problema demográfico iba a provocar reajustes en las aulas" hasta el dictamen "a medida" divulgado esta semana por la Sindicatura de Cuentas, donde el síndico mayor, "el botones del Gobierno" al decir de Medina, viene a difundir "la sensación extraña de que no está controlado en qué se gasta el dinero de la concertada".

El diputado popular se detuvo también en la estrategia de "utilizar a la extrema izquierda, que son Podemos e IU, sacándola a la calle para pedir la supresión de los conciertos y prostituir el debate sosteniendo que las necesidades de la enseñanza pública se deben a la existencia de la concertada".

Foro: "Ataca la libertad"

En la misma línea crítica con la decisión del Principado, el diputado de Foro Pedro Leal interpreta la supresión de aulas como "un ataque sin precedentes a la libertad de enseñanza" y una muestra del "sectarismo socialista" en la gestión educativa, haciendo primar "el componente ideológico frente a las necesidades reales del sistema, ya que los centros afectados habían sido fundados por entidades vinculadas a la Iglesia". La supresión de aulas, concluye el parlamentario forista, recrudecerá el éxodo demográfico en las áreas donde se han eliminado.