La variante de Pajares vuelve a la casilla de salida quince años después. El Gobierno de Rajoy, para asegurarse el voto favorable del único diputado de Foro a los Presupuestos Generales del Estado, asume en su integridad las características del tendido incluidas en el proyecto original para este tramo de Pola de Lena a La Robla, lanzado a principios de siglo por el Ejecutivo de Aznar cuando Francisco Álvarez Cascos estaba al frente de Fomento. Con ello, quedan aparcados, al menos de momento, los planes alternativos diseñados por los exministros José Blanco (PSOE) y Ana Pastor (PP) para compatibilizar de manera inmediata el tráfico de mercancías y el de pasajeros.
La Variante que se licitó en 2003 con Cascos de Ministro consistía en un tendido específico de Alta Velocidad, con los dos tubos del túnel en ancho internacional para el AVE "puro". El hoy secretario general de Foro presentó el proyecto para tráfico mixto de pasajeros y mercancías, pese a que en aquel entonces, como sucede ahora, el sistema español de carga ferroviaria y su parque móvil era de ancho ibérico.
José Luis Rodríguez Zapatero ganó las elecciones apenas un mes después de que se instalara la primera dovela de la Variante y asumió inicialmente el plan de Cascos. Es más, puede que mal asesorado, anunció en julio de 2005, cuando arrancó la excavación del túnel de Pajares, que Oviedo y León estarían conectados por AVE en 2009. Con el avance de las obras, los técnicos empezaron a plantearse seriamente el problema de compatibilizar mercancías y pasajeros. Y más teniendo en cuenta que el tendido de AVE no había pasado de Valladolid y que los proyectos de conexión de la Variante con Gijón y con León estaban en pañales. La decisión de José Blanco, segundo ministro de Fomento de Zapatero, fue ordenar un cambio de planes para instalar el denominado "triple hilo". El sistema, que se está aplicando ahora en tramos del Corredor Mediterráneo para facilitar la conexión ferroviaria de mercancías con Francia, consiste en colocar tres carriles en el tendido. Dos de ellos están a 1.688 milímetros de distancia, que es el ancho ibérico o Renfe para los trenes de carga. El tercero se sitúa a 1.435 milímetros del opuesto, correspondiendo al ancho internacional para que pasan los AVE.
Y llegó la crisis
En plena oleada de recortes por la crisis, Ana Pastor, primera ministra de Fomento de Rajoy, volvió a cambiar el plan para la Variante, pero manteniendo el criterio de compatibilizar convoyes de carga y pasajeros. Su diseño, que es el que se estaba implantando en Pajares hasta este último giro ministerial, consistía en abrir el tramo en ancho ibérico, pero dotado con traviesa polivalente, que es un bloque de hormigón con sujeciones para la colocación de dos carriles de ancho español o dos de ancho internacional. La traviesa polivalente permite que, mediante máquinas especiales, se pueda levantar uno de los carriles y, de forma simultánea, colocarlo de nuevo a una distancia menor con respecto al otro, pasando así del ancho ibérico al de AVE. Se trata de un procedimiento sencillo desde el punto de vista técnico y relativamente rápido.
En el caso de Pajares, la idea de Pastor era, y así se ha hecho en más de 25 kilómetros de trazado, instalar la plataforma de vías con traviesas polivalentes y con carriles de ancho español. Por esas vías circularían los trenes de mercancías y los Alvia, que tienen rodadura desplazable para adaptarse al ancho Renfe y al de AVE. Después, en la medida en que las operadoras ferroviarias adquirieran convoyes de mercancías de ancho internacional y se completaran los trazados de León-La Robla y Pola de Lena-Gijón, se llevaría a cabo la migración a Alta Velocidad.
Álvarez Cascos siempre se opuso a cualquier alternativa que modificase su planteamiento para la Variante con ancho internacional en ambos tubos del túnel. Es más, su regreso a la primera línea política se justificó por la determinación de luchar contra lo que entendía como una "prostitución del proyecto" generada por el ancho ibérico. En el acuerdo con el PP de las últimas elecciones, Foro consiguió introducir íntegramente su plan para Pajares, con la exigencia de que los dos tubos del túnel entren en servicio con el ancho internacional y que el intercambiador que hoy está en León pase a Pola de Lena, dado que el tramo León-La Robla también tendrá que ser de AVE.
Consciente de que el voto de Isidro Martínez Oblanca, único diputado de Foro en el Congreso, puede ser determinante para sacar adelante las Cuentas, el Gobierno ha accedido a poner en marcha ya las medidas pactadas con los foristas. Una alternativa que puede demorar la entrada en servicio de la Variante un par de años y que ha sido rechazada expresamente por el Gobierno regional, la patronal, los sindicatos y todos los partidos menos el PP, que, de momento, guarda silencio.
