La campaña salmonera en las cuencas fluviales del Oriente de Asturias, en la especialidad de "sin muerte" no acaba de ganar adeptos y los ríos se encuentran desiertos de deportistas atraídos por ese tipo de actividad deportiva cuando han transcurrido tres semanas desde el inicio de la nueva temporada de 2017 en aguas continentales asturianas. Y es que los únicos cotos que se han escogido para esa práctica de captura y suelta apuntan al acotado de "Les Tempranes", en Aballe (Parres), justo en las fechas previas del arranque de la pesca con muerte. Las expectativas se centran en el comienzo de la campaña de pesca tradicional, el próximo 16 de abril, cuando se permitirá echar a tierra un salmón por pescador y día hasta alcanzar un máximo de cuatro ejemplares en toda la temporada. "Según tenemos la presa de Niserias veo mal la temporada porque por la presa no sube ni un salmón. Como no la arreglen, en la zona alta la cosa pinta mal. Debían hacer algo en la presa de forma que pasen los salmones. Tal como está el río estos días, sin agua, los salmones no pueden subir porque hay un murete en el que el agua, en vez de saltar por encima, pasa por unos agujeros que tiene por debajo", explica el ribereño cabraliego Fernando Pidal Sobero, de la saga de "Los Pidales".
