"Si se aprueban los presupuestos generales del Estado habrá una reducción muy importante de tasas universitarias para todos". La diputada del PP Susana López Ares animó hoy desde Asturias al visto bueno de unas cuentas que a su juicio "beneficiarían a los jóvenes en materia de becas y empleo" y justificó los déficits de inversión que denuncian los partidos de la oposición parlamentaria: "Ponemos a las personas por delante de los ladrillos y los kilómetros de carretera".

Susana López Ares y el presidente de Nuevas Generaciones en Asturias, Pablo Álvarez-Pire, explicaron los beneficios presupuestarios para la población joven, si es que el Parlamento aprueba finalmente las cuentas. En becas, 1.420 millones de euros. Y en materia de tasas universitarias, una reducción del porcentaje marcado por norma sobre el coste de la plaza de grado y de máster. En los másteres no habilitantes los alumnos deben pagar entre el 40 y el 50 por ciento de ese coste. Con los nuevos presupuestos -explicó López Ares- el límite inferior bajaría del 40 al 15 por ciento. Por concretar, a un alumno de este tipo de máster en la Universidad de Oviedo la rebaja fluctuaría entre los 250 y los 583 euros por curso.

El Estado permite la rebaja, que no podría concretarse sin "compromiso político de cada comunidad autónoma". Es decir, tienen que salir las cuentas de cada autonomía y de cada distrito universitario. López Ares también recordó el compromiso de que "en tres años la interinidad se reduzca por ley hasta el 8 por ciento", con una tasa de reposición del cien por cien en aquellas plazas públicas que tengan atención directa al ciudadano.

Pablo Álvarez-Pire se refirió a los 500 millones de euros del plan de garantía juvenil y para el fomento de empleo joven. De esa cantidad, presupuestada en el proyecto de cuentas generales que comienza mañana a debatirse en el Congreso de los Diputados, saldrán los 400 euros al mes que cobrarán los jóvenes como complemento a su nómina dentro del citado plan.

Susana López-Ares recordó que "el porcentaje de contratos indefinidos en España es ya más alto que el que había antes de la crisis. El 75% de los trabajadores españoles tiene un contrato indefinido" pero reconoció que hay camino por andar en materia sindical "para que el crecimiento de los beneficios de las empresas se traslade a los trabajadores".