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Un anclaje incorrecto, principal tesis de empresarios e investigadores

La única explicación es que el castillo no estuviera bien anclado. Esa es la tesis que ayer defendían los responsables de las empresas de este tipo de atracciones consultados por este periódico. Y ésta es al parecer la principal hipótesis según las primeras investigaciones: la atracción estaba amarrada con dos de los seis anclajes previstos para la total seguridad.

"Si el castillo se instala en un prao, hay que anclarlo con la piqueta y utilizar todos los anclajes por seguridad. Y si es suelo de cemento, por ejemplo, ya vienen preparados para amarrarlos con cuerdas a puntos fijos y también fijarlos colocándoles pesos", explicó Sara Sánchez, gerente de una empresa de alquiler de este tipo de atracciones. "Para que salga volando, es que no estaba bien sujeto", remató.

En términos similares se explicó Delfina Fernández, gerente de una compañía de animación infantil que ofrece también la posibilidad de instalar hinchables. "El accidente tuvo que ser porque estaba mal anclado y hubo un golpe de aire. En realidad es un globo, y hay que sujetarlo", indicó.

Martina Méndez es la gerente de una empresa fabricante de castillos hinchables desde hace una década. "Por la altura, tendría que tener al menos seis enganches. Si salió volando es porque no estaba anclado", aseveró.

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