Carles Martí es director del seminario multidisciplinar sobre el plurilingüismo en España y ha sido senador del PSC hasta 2015. A petición de Podemos fue uno de los comparecientes en la comisión especial sobre el régimen de protección y promoción del asturiano, en la Junta General del Principado.
- ¿Qué impresión tiene sobre el estado de salud del asturiano?
-El asturiano está en una situación compleja pero también se puede contemplar con esperanza. Hay capacidad, voluntad y saber para ir hacia adelante. La situación legal tampoco es cero. Existen bases de apoyo con un tejido cultural y social. Es cierto que sociolingüísticamente tiene problemas estructurales porque el relevo generacional es costoso y en las ciudades su papel es limitado pero se trata de una lengua lo suficientemente viva como para pensar que puede consolidarse.
- ¿La cooficialidad es imprescindible para garantizar el futuro del asturiano?
-Yo prefiero hablar de institucionalización que de cooficialidad. Un reconocimiento fuerte como la cooficialidad es, sin duda, positivo pero tampoco es la panacea universal. Hay muchas lenguas en el mundo que tienen carácter oficial y no por ello gozan de buena salud. Para un lengua hay cuestiones más básicas.
- ¿Cuáles?
- En materia lingüística hay que tener objetivos en tres frentes. Extensión del conocimiento y el aprendizaje, prestigiar la lengua y extender su uso. Si hay cooficialidad, bien; pero si hay consenso sobre esas tres medidas, aunque sea sin cooficialidad, también está bien; partiendo del principio de que las lenguas pueden convivir. Una lengua no tiene por qué expulsar a otra.
- ¿Cuál es la labor del Seminario Multidisplinar sobre el plurilingüísmo en España, que dirige?
-La finalidad de la institución que represento es subrayar el papel del Estado en favor del plurilingüismo, que debe sentirse concernido por todas las lenguas. El asturiano, como cualquiera de las otras lenguas de España, es un patrimonio cultural de todos los españoles no sólo de sus hablantes o de su comunidad autónoma. El Estado, sin forzar nada ni invadir competencias autonómicas, debe tomar medidas, poner recursos, dinero, estímulo y reconocimiento al hecho de que exista el asturiano que, además, no sólo se habla en Asturias, sino también en otras comunidades como Cantabria y Castilla y León. En todo el mundo sólo hay un estado monolingüe, Islandia.
- Ha sido senador del PSC. ¿Cómo está viviendo el proceso de primarias en el PSOE?
-Es un momento apasionante y bastante clave para el partido. Hay un gran debate y no es superficial ni sobre personas sino sobre proyectos políticos y de modelo de partido. Como militante, lo vivo con un sentimiento de trascendencia, de que algo importante está en juego.
- ¿Es irreparable el daño de tanta división interna ?
- Cuando las cuestiones son importantes, provocan algunas tensiones y algunos desencuentros pero la niebla no nos impida ver el bosque. Lo importante es hacia dónde se orienta el futuro del partido.
- ¿Las primarias están demasiado marcadas por el comité federal del 1 de octubre?
-No sé si demasiado, pero marcadas sin duda alguna. No podía ser de otra manera porque nunca había pasado algo de ese calibre en la historia del PSOE pero no se trata de unas primarias ni ajuste de cuentas ni de mirar para atrás sino de hacia dónde hay que posicionar al partido para volver a tener el apoyo de la sociedad y a gobernar el país.
- ¿Entonces cree que el partido saldrá cohesionado de estas primarias?
-Otros piensan de otra manera pero yo creo que la democracia nunca es un mal sistema para resolver los problemas. La mayoría se puede equivocar pero si alguien está legitimado para equivocarse es la mayoría. Una vez que hayan hablado las urnas todo será mucho más sencillo.
- ¿El resultado de los avales da pistas del desenlace?
-La principal pista es que el resultado será ajustado, sin duda alguna. Hay un equilibrio de fuerzas claro.
- En Cataluña hubo una diferencia muy clara, en avales, a favor de Pedro Sánchez. ¿A qué obedece esa situación?
-Mantener el no a Rajoy era una posición absolutamente extendida en Cataluña. Y al ser Pedro Sánchez la persona que defendió esa posición es lógico que haya ese paralelismo. Todo lo ocurrido alrededor de la corrupción, desde la investidura hasta ahora, nos reafirma en que la continuidad de Rajoy era peor escenario que otras elecciones o un gobierno alternativo.
- ¿Cómo juzga el papel de la gestora y de Javier Fernández?
-Javier Fernández ha hecho un buen papel al frente de la gestora, ademas desde un primer momento dijo que no iba a ser candidato y eso evitó que pudiera haber un nivel de distorsión. Pero la gestora, en sus funciones, se ha extralimitado en el tiempo y en su labor. Su balance no puede ser bueno porque hemos estado con una dirección provisional en el PSOE demasiado tiempo.
