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Asturias limitará el acceso de turistas a los puntos de observación de osos

Recursos Naturales anuncia una regulación específica para ordenar la actividad y no acosar a los plantígrados, como reclamaban los expertos

Varios observadores, el sábado, en el mirador de La Peral, en Somiedo. M. G. SALAS

El Principado trabaja ya en una regulación específica sobre la observación de osos, que limitará el acceso de turistas a los miradores. La nueva norma, cuyo borrador estará listo este año, determinará además los puntos de avistamiento, la distancia a la que deberán situarse los visitantes de la especie y las empresas que podrán desarrollar la actividad, entre otras múltiples medidas. El anuncio lo hizo este fin de semana en Somiedo el director general de Recursos Naturales, Manuel Calvo, en el marco del I Encuentro Nacional de Turismo de Observación de la Naturaleza. Los expertos, que pidieron en las jornadas una ordenación urgente de la actividad, aplauden el "enorme paso" dado por la consejería de Desarrollo Rural. El objetivo de la normativa es no acosar a los plantígrados y compatibilizar la conservación con el desarrollo económico de los municipios oseros.

La regulación autonómica, adelanta Manuel Calvo, no atenderá sólo a los espacios naturales protegidos, sino también a "las áreas de distribución actuales y potenciales" de la especie. La norma se asentará en ocho principios generales: el manual de buenas prácticas para la observación del oso cantábrico del Ministerio de Medio Ambiente, la responsabilidad, la compatibilidad, la sostenibilidad, la conservación, el desarrollo socio económico, la promoción de los parques naturales y la regulación. "La idea no es prohibir por prohibir, es ordenar", insiste el director general de Recursos Naturales, que subraya "el compromiso" asumido por su gabinete para no causar molestias a la población osera, compuesta en la actualidad por unos 250 ejemplares en toda la Cordillera.

El manual de buenas prácticas da pistas sobre la futura normativa: los observadores deben tratar de pasar desapercibidos ante los animales y comportarse adecuadamente, no se debe compartir información sobre la presencia de la especie en lugares concretos, evitar siempre los encuentros cortos... Manuel Calvo explica que la regulación contará también con la intervención de la dirección general de Turismo, a la cual le compete determinar las empresas que podrán intervenir en la actividad. La norma, que vendrá a complementar otras regulaciones generales a nivel nacional y autonómico, estará "abierta", como indica Calvo, a la participación de los diferentes colectivos y será susceptible de mejoras si los nuevos conocimientos científicos de la especie así lo aconsejan.

En aras de proteger la especie, la cual sigue estando en peligro de extinción pese al aumento de la población, la consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales sacó el pasado 27 de abril una resolución "por la que se establecen restricciones de acceso y tránsito para visitantes en determinadas áreas críticas para el plantígrado en el Parque Natural de Las Ubiñas- La Mesa". En concreto, limita el acceso a las áreas de "Peña Viguera" y de "Monte Palacios" en el Concejo de Teverga, y del "Picu Gorrión" o "Picu Mayor" en Quirós hasta el 31 de agosto de 2017 o hasta la comprobación, de que los osos no sufren molestias.

Los organizadores del I Encuentro Nacional de Observación de la Naturaleza, celebrado en Somiedo, están satisfechos con el resultado del evento, que reunió a más de cien personas, entre visitantes y expertos. Además de charlas, se hicieron dos salidas de observación de osos, en las que se vieron a un total de cuatro ejemplares. En este contexto, el subdirector general de Medio Natural del Ministerio de Agricultura, Daniel Serrano, estimó en unos 4,5 millones de euros el impacto actual del turismo de osos, lobos y linces en España.

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