Pánico en el centro comercial de Paredes (Siero). Eran las nueve y media de la noche aproximadamente cuando en una zapatería coincidieron dos matrimonios con sus respectivos hijos y se produjo una discusión que fue creciendo de tono hasta que uno de los hombres le pegó un puñetazo al otro. Una de las mujeres sacó entonces un spray de pimienta que roció por toda la tienda, causando grandes molestias tanto a clientes como empleados. En ese momento del enfrentamiento, uno de los hombres sacó una navaja “como un brazo de grande”, según aseguró un testigo presencial.

Fue ver esta arma blanca de grandes dimensiones y desatarse el pánico entre los clientes, que comenzaron a huir a la carrera por los pasillos del centro comercial. Evidentemente, la alarma terrorista que se vive estos días, y las imágenes de los yihadistas recorriendo las calles de Londres apuñalando a los transeúntes contribuyeron a generar esta situación. Los clientes trataban de meterse en las tiendas, mientras los empleados de éstas las cerraban a cal y canto, ante el temor de que se tratase de un ataque terrorista.

Alguien llamó a las fuerzas de seguridad. Casi de inmediato, se presentaron en el centro comercial dos patrullas de la Policía Local de Siero y otras dos de la Guardia Civil, que buscaron a las personas que se habían enfrentado de forma tan brutal y las detuvieron.

Testigos presenciales indicaron que varias personas fueron detenidas y estaban siendo interrogadas por estos hechos que desataron el pánico casi al cierre dl horario comercial. El temor a un atentado terrorista es tal entre la ciudadanía que el simple hecho de ver un arma blanca puede generar el pánico.