La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

JESÚS GUTIÉRREZ | Secretario de organización de la Federación Socialista Asturiana

"Javier Fernández deja el PSOE mejor de como se lo encontró el 1 de octubre"

"Hablar de España como nación de naciones choca con lo que era el sentir del PSOE; se puede cambiar en un congreso, pero sería un error"

Jesús Gutiérrez, en su despacho de la Federación Socialista Asturiana. IRMA COLLÍN

Es el decano de los secretarios de organización del PSOE de toda España. Por poco tiempo, hasta el próximo congreso de la Federación Socialista Asturiana. Atrás quedarán 13 años de una intensa actividad, marcada por los últimos doce meses de catarsis, un período convulso incluso para alguien como Jesús Gutiérrez (Mieres, 51 años) que antes de llegar a la política y a la actividad sindical bregó en la brigada de salvamento minero de Hunosa con algún rescate "tremendo", de los que dejan huella más allá de la memoria.

- ¿Cuál es su horizonte en la política?

-Nunca me tracé horizontes en política. Ahora lo que tengo por delante es terminar el mandato con Javier Fernández en la Junta.

- ¿Quema mucho estar trece años en un puesto de tanta exigencia como es la secretaría de organización de cualquier partido?

-Esta secretaría es ingrata, es la que tiene que ejercer de malo de la película. Trece años son muchos años, quizá excesivos.

- ¿Entonces tiene ganas de pasar página?

-Siempre estuve cómodo y trabajando a gusto hasta este último año, que ha sido muy desagradable con un clima irrespirable para la familia socialista. Si el PSOE se caracteriza por la fraternidad y el respeto, en muchas ocasiones no se hizo uso de esa fraternidad y no se tuvo respeto, muy en particular a Javier Fernández, uno de los valores más importantes del socialismo español aunque se le dé más relevancia en el resto de España que en que en Asturias.

- ¿Ya ha pedido perdón a Pedro Sánchez y a su equipo?

-No. Comparto la reflexión de Javier Fernández. Defendimos una posición clara sobre el modelo de Estado y de partido, que dista bastante del que quiere Pedro Sánchez. Pero eso no significa que unos tengamos más razón que otros. La razón la dará y quitará el tiempo, por eso no hay que pedir perdón, simplemente reconocer la victoria de Pedro Sánchez, que no hay ningún problema en hacerlo, y asumir la derrota pero no es necesario pedir perdón.

- ¿Cómo bajan las aguas en la FSA tras las primarias?

-En la Federación dimos muestras de que las aguas revueltas deberían intentar canalizarse a valles más apacibles, menos escabrosos. Por eso intentamos pactar una candidatura al congreso federal, consecuente con lo que los militantes expresaran en las primarias. Quisimos hacer esa propuesta el mismo domingo, antes de conocerse los resultados, porque nos parecía lo más elegante, pero los partidarios de Pedro Sánchez prefirieron aplazar esa reunión al día siguiente. Con ese reparto aritmético, queríamos evitar la pelea permanente. Se trataba de apaciguar los ánimos, que estaban muy calientes, y empezar a dar muestras de una tranquilidad, necesaria más pronto que tarde, salvo que queramos destrozar al PSOE. La tranquilidad también interesa a los vencedores de las primarias.

- ¿Ha habido contactos posteriores con el equipo de Pedro Sánchez para pacificar la organización?

-Se ha intentado dar pasos para preparar una buena marcha del congreso federal, incluso se mandarán autobuses al acto de Pedro Sánchez del próximo domingo. Hay un nuevo escenario y un nuevo secretario general y a él nos debemos todos los militantes, compartamos o no todas sus ideas y planteamientos, como la de la plurinacionalidad.

- ¿Ha dado motivos Pedro Sánchez para contar ya con un sector crítico?

-Intuyo que la política de gestos del secretario empezará a visualizarse en el seno del congreso federal.

- Ya que habla de gestos, ¿ha visto alguno en Asturias de los ganadores de las primarias?

-No los he percibido. No se puede generalizar pero hemos visto alguna declaración incendiaria, con calificativos gruesos. Es mejor no entrar en esa dinámica, salvo que entre todos queramos que el PSOE salte por los aires. Tras unas primarias se espera la generosidad de los que ganan y el respeto y el reconocimiento de los que perdimos.

- Adriana Lastra y María Luisa Carcedo han denunciado que en este último año han sido ignoradas y ninguneadas por la dirección de la FSA.

-Ahí tengo que discrepar. Los últimos gestos que tuvo el secretario general de la FSA con María Luisa Carcedo fue designarla senadora en representación de la Junta General y con Adriana Lastra, proponerla al comité regional de número uno al Congreso por Asturias. Dicho esto, qué más se puede hacer, cuando ambas llevaban una trayectoria en esta Federación, estrechamente vinculada al secretario general. Esa trayectoria no se puede romper por apreciaciones en las que no estoy de acuerdo. Todos somos conscientes de que en el Comité Federal del 1 de octubre se produjeron acontecimientos que a nadie gustaron pero unos y otros decidieron posicionarse en una y otra vertiente.

- ¿Cuándo empezó ese distanciamiento?

-Hubo varios pasos. El primer encontronazo con Pedro Sánchez fue en el anterior congreso. A partir de ahí es legítimo posicionarse pero para algunos sectores del partido resultó muy fácil abandonar a Javier Fernández cuando ha sido un referente del socialismo asturiano en España y le ha tocado pelear con situaciones nada fáciles como el "caso Marea" o el asunto de Villa, ha tomado decisiones tajantes y ha sabido lidiarlas bien. Cada uno es muy libre de tomar caminos distintos pero debe procurar ser coherente.

- A los pedristas no les ha gustado nada la reunión que Javier Fernández mantuvo con 200 afiliados días después del precongreso federal.

-Adrián Barbón suele comentar que una reunión de socialistas siempre es algo positivo. Si hubiera algo que ocultar no estaría grabada. Javier Fernández quiso dar su agradecimiento a la gente que ha estado con él siempre, hizo un llamamiento a la unidad y pidió apoyo para los dos años que le quedan como presidente del Principado.

- ¿No hubo conspiración alguna?

-Si pedir unidad y apoyo para que completar la legislatura de un Gobierno socialista es conspiración cómo hay que tomar que en noviembre de 2015, en plena campaña electoral, tres miembros de la ejecutiva federal se reúnan con 15 dirigentes en un restaurante para comentar que se van a perder las elecciones, que Javier Fernández se posicionará en contra y que habrá que poner en marcha un grupo de apoyo a Pedro Sánchez en Asturias.

- ¿El papel activo de Javier Fernández con la gestora y a favor de la abstención le ha pasado factura interna?

-Sin duda. La posición que ha tenido Javier Fernández en el ámbito federal le ha erosionado. Para él lo más fácil hubiera sido ponerse de perfil y no asumir ninguna responsabilidad, pero eso es no conocerle. En un momento crítico todos, sin excepción, miraron a Javier Fernández como la única persona capaz de sacar del atolladero al PSOE. Los españoles descubrieron a un político asturiano que fue a Madrid en un momento muy difícil de la política española y se mostró capaz de encauzar al partido para ir a unas primarias que salieron muy bien y sitúan al PSOE mejor de lo que estaba el 1 de octubre.

- Los pedristas reprochan que Javier Fernández se alineó con Susana Díaz mucho antes del 1 de octubre.

-El Comité Federal fue el colofón a una trayectoria de dificultades que empezó con la derrota de diciembre de 2015 y siguió con la de meses después, los peores resultados de la historia. La posición de Javier Fernández con el modelo de Estado siempre fue clara, tiene muy claro el concepto federal del Estado. Hablar ahora de otras ideas, de plurinacionalidad y de nación de naciones, choca con lo que era el sentir tradicional del PSOE. Eso no quiere decir que no se pueda cambiar en un congreso. Para tomar ese tipo de decisiones están los congresos, pero sería un error.

- ¿Asiste el PSOE a una refundación con enmiendas como la de la plurinacionalidad?

-Pedro Sánchez debe explicar con suma claridad qué abarca el concepto de la plurinacionalidad. No se puede andar con ambigüedades sobre el artículo 2 de la Constitución porque entonces el PSOE puede perder votos con partidos que sean más claros. El modelo de Estado no se cambia cada cuatro o cada ocho años.

- ¿El congreso autonómico supondrá una nueva entrega de la pugna entre pedristas y javieristas?

-Los ismos siempre suenan mal. En Asturias hay una forma de proceder, que encarna Javier Fernández, y otra forma, nueva, suponemos muy distinta, que en Asturias apadrina Adriana Lastra, que es el referente del pedrismo no ya en sólo Asturias sino en el ámbito federal. Veremos cómo se definen esas posiciones. Yo creo que habrá primarias en Asturias, con más de un candidato, pero no debemos de escandalizarnos. El resultado federal no tiene porqué trasladarse de forma automática al autonómico.

Compartir el artículo

stats