Asturias prosigue con su imparable declive demográfico, según constatan los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) referidos al análisis provisional de los datos de 2016 referidos al movimiento natural de la población; es decir, nacimientos, defunciones y muertes.

El balance vegetativo (sin contar los movimientos migratorios) señala que Asturias perdió 6.851 habitantes y es la tercera mayor caída de toda España, sólo superada en cifras brutas por Castilla y León (11.698) y Galicia (12.683).

Este acusado descenso se debe al elevado envejecimiento de la población asturiana y la bajísima fecundidad. Así, Asturias tiene el Índice Coyuntural de Fecundidad, que mide el número medio de hijos por mujer. Cada asturiana tiene de media 1,04 hijos, muy por debajo de la media nacional (1,33) ycon gran diferencia del alto índice que se registra en Melilla (2,50).

Esa situación ocasiona que el numero de nacimientos sea muy bajo. En Asturias nacieron 6.347 niños y niñas a lo largo del año pasado, algo menos que en 2015 (6.455) y casi 1.500 menos que la cifra que había en 2010, gracias en gran medida a las madres inmigrantes.

A ello se suma una elevada mortalidad (aunque descendió ligeramente respecto a 2015), ya que el pasado año murieron 13.198 asturianos. Asturias tiene la mayor tasa bruta de mortalidad (12,7), un índice que mide el número de defunciones por cada 1.000 habitantes. Ese índice establece que de cada 1.000 asturianos, aproximadamente 13 fallecieron en 2016.

Con todo, los asturianos no son de los que más esperanza de vida tienen de toda España: al contrario, se encuentran en un punto bajo de la tabla. Los asturianos tienen una esperanza de vida al nacimiento de 82,7 años, pero la cifra está en los 83,2 años. La mayor esperanza de vida la tienen los madrileños, con 84,7 años.