La ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, y los consejeros autonómicos del ramo acordaron ayer ampliar el plan contra la hepatitis C, lo que supone universalizar el tratamiento para todos los pacientes, pero sin que se haya consensuado una financiación específica, como reclamaban las autonomías. En Asturias han recibido el tratamiento curativo, hasta la fecha, algo más de 1.600 enfermos de los grupos más graves. El consejero de Sanidad del Principado, Francisco del Busto, afeó a la ministra la negativa de la Administración central a colaborar con los gobiernos autonómicos en la financiación de estas terapias. "La voluntad política se demuestra en los presupuestos", subrayó Del Busto a Montserrat.

La extensión del plan de abordaje de la hepatitis C fue uno de los 31 puntos del orden del día de la reunión del Consejo Interterritorial de Salud, el primero de la ministra desde que accedió al cargo. Tras casi diez horas de reunión, Montserrat argumentó, en rueda de prensa, que no se puede "crear una financiación específica por cada medicamento", pero se comprometió a celebrar un consejo monográfico sobre financiación sanitaria cuando concluyan los trabajos de los grupos de la Conferencia de Presidentes sobre financiación autonómica.

Según la ministra, en la hepatitis C "se han reducido los precios diez veces y ahora el tratamiento cuesta lo mismo que hace diez años, y entonces no tenía la misma eficacia", indicó. La terapia por paciente cuesta unos 10.000 euros, con lo que tratar a los afectados pendientes supondría 600 millones de euros en tres años, hasta 2020, fecha hasta la que se ha ampliado el plan aprobado en 2015.

Otro de los asuntos tratados fue el real decreto que regula la denominada "prescripción enfermera", después de que hace unas semanas se lograra desbloquear en el Foro de las Profesiones Sanitarias el conflicto generado por esta normativa entre los médicos, a favor del texto, y las enfermeras, que se oponen. País Vasco, Navarra, Baleares y Comunidad Valenciana plantearon derogar el decreto. La ministra abogó por el diálogo. Asimismo, se dio el visto bueno a la creación de la primera Estrategia Nacional de la ELA (esclerosis lateral amiotrófica).