La presión parlamentaria sobre el nuevo consejero de Infraestructuras no admite demora y la izquierda empieza por Sogepsa. Debut y despedida, Fernando Lastra se estrenará en el pleno del jueves obligado a responder por primera vez en la cámara como integrante del Gobierno en el último pleno del periodo de sesiones. Podemos le preguntará por sus planes respecto a la sociedad mixta de gestión del suelo a la vista de las conclusiones de la auditoría que la examina y que el Ejecutivo sopesa enviar a la Fiscalía. La formación morada añadió ayer al orden del día otra pregunta dirigida al nuevo consejero, sobre la ley de transportes y movilidad, y suma su bienvenida descreída y exigente a la de toda la oposición, particularmente a la de la izquierda. La justificación de la urgencia del portavoz de Podemos, Emilio León, dice que "se nos haría raro dar cien días de cortesía a un diputado que lleva treinta años en el parlamento".

Por el mismo camino, pero aún sin pregunta parlamentaria, van sin excepciones los demás. El portavoz de IU, Gaspar Llamazares, urge al nuevo consejero a que "defina ya la posición del Gobierno sobre Sogepsa" y salve al menos el suelo industrial en manos de la sociedad, "que corre el riesgo de perderse". El apremio se escucha en términos si0milares a la derecha, donde José Agustín Cuervas-Mons (PP) entiende que la asunción del mando de la Consejería obliga a Lastra a "tomar decisiones rápido" sobre la multitud de "frentes" que Belén Fernández deja abiertos en una "consejería de suma complejidad". Menciona Sogepsa, la zona logística de Gijón o la política de contención de la contaminación y "sobre todo" espera que el hasta ahora portavoz socialista en la Junta "sepa cambiar de chip" y entienda con la misma celeridad "que ya no defiende ya los intereses del grupo socialista, sino los de todos los asturianos".

La Consejería, abunda el portavoz de Ciudadanos, Nicanor García, "es un campo minado que tiene problemas desde la gestión del suelo a la contaminación del aire" en la que "le deseamos a Fernando Lastra mucha suerte, porque va a tener por delante una gestión muy complicada".

El comité de bienvenida ha sido poco del agrado, por "pintoresco", en el grupo que sostiene al Gobierno. El nuevo portavoz socialista, Marcelino Marcos Líndez, lamenta "la desconsideración" de la oposición hacia "una persona que a lo largo de los años se ha distinguido por su talante dialogante" y llama "falta de cortesía" a la prisa por reprobar a quien ni siquiera acaba de llegar. Le asombra, dijo ayer el diputado tras su primera Junta de Portavoces, que la crítica al nombramiento haya llegado "incluso desde IU, que siempre ha pedido que el perfil de los miembros del Gobierno sea político", una condición que Lastra "cumple perfectamente". "Por supuesto que el PSOE tira de cantera", añade Marcos haciendo frente a otra de las críticas, "mientras otros hacen el papel de equipos filiales y el juego sucio a otros grupos". El elegido es el idóneo, concluye, también porque "conoce perfectamente" esta consejería, dado que "llevó mucho tiempo en el grupo parlamentario los temas de infraestructuras y medio ambiente".