Adrián Barbón y José María Pérez tienen 120 horas de plazo para confirmar si aspiran a las primarias de las que saldrá el sucesor de Javier Fernández. El alcalde de Laviana y el portavoz socialista del ayuntamiento de Gijón podrán formalizar su candidatura desde mañana lunes. Por delante cinco días en los que se despejará la gran incógnita sobre si finalmente hay dos candidatos a la secretaría general del PSOE. Un dilema inédito para toda una generación de socialistas asturianos ya que desde su elección en 2000, nadie había discutido el liderazgo de Javier Fernández que ahora ha decidido hacerse a un lado.
Del próximo congreso de la Federación Socialista Asturiana saldrá el primer secretario general criado en la "cantera" de las Juventudes Socialistas. Tanto el alcalde de Laviana, Adrián Barbón, como el portavoz gijonés José María Pérez, iniciaron su andadura política en las Juventudes al igual que otros dirigentes que ya están en destacados puestos orgánicos e institucionales, como la nueva "número dos" del PSOE, la riosellana Adriana Lastra, el consejero de la Presidencia regional, Guillermo Martínez o el eurodiputado ovetense Jonás Fernández.
Adrián Barbón es el candidato que "los ocho mil afiliados de la FSA saben" que cuenta con el apoyo de Adriana Lastra "sin necesidad" de que la nueva vicesecretaria general tenga que decirlo públicamente, como ella misma declaró el pasado viernes antes de una espicha en Llanes con la militancia, en la que también estuvo el alcalde de Laviana. Barbón fue catalogado en 2008 como el "Obama español" por Norma Bernad, asesora en comunicación y entonces "coach" de los políticos del PSOE, quien destacaba "su don innato para hablar, que no es habitual". En ese tiempo ha sido diputado en el Congreso, apenas un mes, y presidente de la Asociación de Comarcas Mineras (ACOM). Ahora las plataformas pro Pedro Sánchez en el proceso federal le han propuesto de manera unánime como candidato a la secretaría general de la FSA, ayer las de Siero y Noreña.
José María Pérez ya era con apenas 30 años uno de los concejales más influyentes en el equipo de Paz Fernández Felgueroso y en 2012 dio el paso al parlamento asturiano donde asumió la portavocía adjunta del Grupo Socialista. En las elecciones de 2015 fue el candidato a la Alcaldía de Gijón.
Pacificador y dialogante son dos de la señas de identidad de las que hace gala en los encuentros que mantiene estos días a lo ancho y largo de Asturias antes de decidir si finalmente es el candidato alternativo, capaz de aglutinar apoyos de afiliados que en el proceso federal habían votado a Patxi López, Susana Díaz y a Pedro Sánchez. El tirón que pueda tener en Gijón sería también otra de sus principales bazas. El viernes, a más tardar, se sabrá si hay pulso por la FSA.
