La Consejería de Educación defenderá reforzar la investigación universitaria en el nuevo Plan de Ciencia, Tecnología e Innovación (PCTI), que deberá entrar en vigor en 2018 al acabar el actual el próximo mes de diciembre. La propuesta de la directora general de Universidades, Cristina Valdés, pasa por conseguir más financiación, con un reparto que favorezca a los científicos e investigadores de los equipos asentados en la Universidad, y que además en la selección de personal tenga más peso la meritocracia de los candidatos, con el objetivo de atraer tanto a investigadores asturianos que se hayan ido como a otros de otras comunidades autónomas e incluso de otros países.

Valdés intervino ayer en el debate generado por los científicos asturianos que reclaman un "plan regional por la ciencia" que reactive la investigación en el Principado. Un acuerdo que asegure la suficiente financiación, con convocatorias mínimas de cinco años de duración que se puedan renovar en función al cumplimiento de objetivos y que permitan, por tanto, desarrollar una carrera científica. Pero no sólo se trata de dinero. También reclaman a la Universidad menos burocracia; favorecer la incorporación de nuevos científicos en función de sus méritos y no del departamento de acogida; ofrecerles la oportunidad de convertirlos en plantilla fija mediante cursos de méritos, y aprovechar todo el potencial que tienen los equipos, edificios e infraestructuras conlos que cuenta y que están infrautilizados.

La directora general de Universidades eludió entrar en críticas contra otras entidades, estamentos o instituciones y se limitó a explicar que en la negociación entre el Principado y la Universidad para sus presupuestos existe una aportación ordinaria, otra partida destinada a infraestructuras y un bloque de financiación sujeta al cumplimiento de objetivos, de los que una parte se refiere precisamente a la investigación. "La negociación está avanzada y yo estoy de acuerdo y defiendo a los científicos de la Universidad, que se dedican a la investigación básica y que reclaman que haya mejoras y que se les preste más atención".

En este sentido la directora general de universidades aseguró que en el nuevo Plan de Ciencia, Tecnología e Innovación "se van a realizar cambios para reordenar y reforzar la investigación universitaria".

También anunció que la próxima convocatoria de las becas predoctorales Severo Ochoa ya presentará algunos cambios este año, por ejemplo con la tramitación electrónica, y que se mantendrán las 55 plazas del año pasado frente a las 45 de las anteriores ediciones.

Estas mejoras son, en todo caso, insuficientes a primera vista si se tienen en cuenta que las reivindicaciones de los científicos asturianos tienen como objetivo que Asturias sea atractiva para investigadores nacionales e internacionales, como es el País Vasco. De ahí que reclamen personal, laboratorios, equipamientos, facilidades a investigadores que hayan obtenido financiación para proyectos destacados, y que se hagan convocatorias de ayudas pre y post doctorales de una cuantía y duración razonables para conseguir que sean lo más competitivas y atractivas posibles.

Los investigadores coinciden en que es necesario cambiar el modelo, tanto el que utiliza la Administración regional como el de la Universidad.