La idea de que la izquierda asturiana juega al "tres en raya" con sus llamadas a pactos y acuerdos la acuñaron, pásmense, el PP y Podemos. ¿A qué esa coincidencia? Fácil: ni uno ni otro confía en que sea posible que la fragmentada izquierda del Principado pueda ponerse de acuerdo en nada. Entonces ¿por qué todas estas representaciones de alianzas? Como en verano hay que entretener al personal, no viene de más dar la impresión de que al menos lo imposible se ha intentado.
El pasado lunes, Pablo Iglesias e Íñigo Errejón firmaban al alimón un artículo en un periódico gratuito de tirada nacional en el que, aparentemente, marcaban un cambio de paso en la formación morada. Aunque el texto se refería básicamente a la situación de Madrid, advertían de la necesidad de impulsar "gobiernos del cambio" en las comunidades autónomas "en este ciclo". Hay en el PSOE e IU quien ve en esto una advertencia para que Podemos Asturies abandone su posición combativa en el Principado y se avenga a negociar no sólo con IU (lo está haciendo un poco a regañadientes, dicen en la coalición) sino también con el PSOE.
Iglesias y Errejón condicionan ese diálogo a un PSOE de cambio; esto es, sanchista. Entonces ¿una victoria de Barbón allanaría el entendimiento? "No esperamos cambios profundos en el PSOE del SOMA, Esther Díaz y Barbón", dicen fuentes de Podemos. Los podemistas asturianos miran con mucho recelo al PSOE y exigirán signos públicos de ruptura con el pasado inmediato, que incluye asuntos como el "caso Marea" (atentos al revuelo que causará la sentencia en medio de las primarias socialistas), El Musel o las investigaciones sobre UGT.
A ojos de Podemos Asturies, el proceso de renovación en la FSA sólo es "una reordenación de las familias históricas del PSOE con dos candidatos que llevan en política casi dos décadas", en referencia tanto a Adrián Barbón como a José María Sánchez. Con esos mimbres, poco horizonte de acuerdo hay, porque la formación morada no se fía del PSOE. Y menos del "PSOE antiguo", al que ven guarecido en Asturias y Andalucía. Sólo una intervención de la dirección nacional de Pablo Iglesias, que no sería bien recibida entre los podemistas asturianos, podría cambiar las tornas. O eso, o que la futura dirección de la FSA y el Gobierno se avengan a aceptar lo que Podemos e IU vayan acordando unilateralmente... y ya veremos. "Lo que acordemos tendrá que salir en el BOPA...", le espetó Ramón Argüelles, coordinador de IU a Daniel Ripa, secretario general de Podemos, en la reunión que ambas formaciones mantuvieron el pasado martes.
Una de las propuestas lanzadas por Podemos fue la elaboración de una Ley de Servicios Sociales, a la que IU no ha dudado en sumarse. Esta misma semana está previsto el intercambio de documentación para consensuarla y trasladársela a los socialistas. De paso, IU efectuará su propio test para saber si Podemos va de farol en ese acercamiento de la izquierda que, por ahora y a la vista de todos los condicionantes, parece lejos.
