La cantante avilesina Yoli del Río animó la tarde de ayer a las decenas de personas que pasaron por el stand de LA NUEVA ESPAÑA . Gracias a un variado repertorio orientado a todo tipo de públicos, la artista provocó el aplauso unánime de los allí presentes, algo que ella tomó con cariño. "Todos los años vengo y la gente me trata muy bien, volcándose letra a letra con mis canciones", cuenta la avilesina.

Se trata de una cantante cuyas raíces están en el barrio de Llaranes, donde comenzó a interpretar coplas con sólo 13 años. Ello sin dejar de lado otros estilos musicales como el pasodoble o el corrido que iría experimentando gracias a la Agrupación Artística Gijonesa, asociación cultural en la que creció profesionalmente.

A partir de ahí su carrera fue imparable, pasando por dos grandes orquestas y lanzando un disco en 2014 titulado "Yo me llamo cumbia", el cual le valió el reconocimiento del sector y de la crítica. Eso sí, con una década de descanso de por medio -se reincorporó en 2009-, tras la que asegura le resultó muy complicado volver a hacerse a los escenarios. Su profesión la ha llevado a participar en giras por todo el país, recorriendo miles de kilómetros en espectáculos de los que guarda numerosas anécdotas, como "una ocasión en que me tocó actuar en pleno invierno y me congelaba", recuerda.

Sin embargo la cantante no pierde la ilusión por hacer lo que de verdad le gusta: "Es muy duro, pero mientras la gente baile y se lo pase bien conmigo esa es la mejor satisfacción", dice Del Río.

José Manuel Iglesias tomó el relevo de la avilesina con una actuación que elevó por a las nubes la emoción de un público totalmente entregado. El artista gijonés tocó una gran amplia variedad de palos, pero siempre con la música latina como principal argumento. En su actuación aprovechó también para celebrar sus 25 años en la música y entregar a la audiencia "una recopilación de mis temas más sonados". Cumbia, salsa, merengue fueron los estilos elegidos principalmente para hacer bailar al público e inyectar una dosis festiva de optimismo. La música mexicana también significa mucho para Iglesias. "También me gusta cantar rancheras, porque cuando era pequeño era lo que más cantaba", explicó el cantante.

Ahora prepara ya su próximo trabajo en forma de disco. "En principio comenzaré a grabar los temas a final de año y si Dios quiere en mayo del año que viene ya estará a la venta", apuntó el artista. Asimismo, Iglesias quiso valorar muy positivamente la oportunidad de cantar en la Feria de Muestras. "Es un gran escaparate y siempre me he sentido muy cómodo, es como estar en una reunión de amigos", manifestó.