La patronal del turismo de Asturias, OTEA, quiere participar en la organización de los actos conmemorativos de los centenarios que coincidirán el año que viene en Covadonga. El nuevo abad del Santuario de Covadonga, el avilesino Adolfo Mariño Gutiérrez, advirtió a principios de mes, al tomar posesión de su cargo, que el real sitio tiene "una misión religiosa y no turística". Los empresarios comparten esa visión, pero advierten que también tiene un ámbito turístico, "como el Vaticano, Lourdes, Montserrat o Santiago de Compostela". Por eso, piden participar en la organización de los actos de 2018 para "conseguir la máxima coordinación".
Covadonga aglutinará en 2018 tres celebraciones: el primer centenario de la coronación de la Santina; el decimotercer centenario de la batalla de Covadonga (algunos historiadores la sitúan en el año 722 y otros indican que ene 718 se constituyó el reino de Asturias), y, además, el centenario de la creación del parque nacional de Covadonga, ampliado a los Picos de Europa.
El Principado, el Arzobispado y el Ayuntamiento de Cangas de Onís ya se pusieron manos a la obra y el pasado mes de abril celebraron la primera reunión para diseñar los actos conmemorativos. Pero nadie ha contado con los empresarios del sector turístico. O dicho de otro modo, con la hotelería y hostelería regional.
El presidente de la patronal sectorial, José Luis Álvarez Almeida, se mostró "de acuerdo" con el abad de Covadonga en cuanto a que Covadonga es un símbolo religioso. "Ahí no hay discusión. Lleva cientos de años siendo así, no es motivo de debate y debe de seguir siendo así". Pero dicho esto, "hay una realidad: tenemos que convivir el ámbito religioso y el turístico, porque ambos existen".
Y es que, según los empresarios, los Lagos de Covadonga son claramente turísticos, lo mismo que el propio Santuario. "Si no, que nos expliquen qué pasa con el mismo Vaticano, o con Lourdes, con Montserrat o mucho más cerca, con Santiago de Compostela".
De ahí que la patronal de turismo pida participar en la organización de los eventos del próximo año. "No se ha contado con nosotros para nada. No sabemos qué previsiones existen, si se van a organizar paquetes concreto, cómo ni cuándo. Desconocemos qué es lo que se quiere hacer ni cómo ni cuándo. Y suponemos que habrá que tener previsiones para que se pueda atender correctamente y con calidad a todos los que lleguen a Asturias. Quizás tengamos ideas para vender un paquete turístico al mundo y nadie nos ha preguntado. ", incidió Álvarez Almeida.
El tren cremallera
En opinión de la patronal del turismo asturiano, "falta diálogo. No somos los empresarios los que tenemos que ir picando a las puertas preguntando si hay algo para nosotros. Tenemos condiciones y ofertas que hacer y sería el Gobierno regional el que tendría que preguntar si para los eventos que quieran organizar estamos preparados y qué se puede ofertar a quienes vengan. Si prevén que lleguen a Asturias miles de personas, ¿han pensado dónde alojarlas y cómo? ¿Han pensado si se puede ofrece un paquete con distintas ofertas? Esto no puede ser. Hace falta diálogo y a nosotros nadie nos ha llamado ni preguntado nada".
El presidente de OTEA extrapola la falta de diálogo en los actos conmemorativos de Covadonga al proyecto del denominado tren cremallera a los Lagos de Covadonga. "Aquí todo el mundo opina si le gusta, si no le gusta, si le parece bien o mal, y el debate no es ese. Se debería sentar a los sectores y administraciones implicas y decir ¿qué tipo de turismo queremos en Asturias? ¿Queremos que sea sostenible, respetuoso con el medio ambiente, que permita su ordenación? ¿Es mejor eso o una carretera llena de coches y de autobuses?"
En realidad se trata de preguntas retóricas, porque Álvarez Almeida responde abogando por crear una mesa de negociación en la que se plantee "la elaboración de un proyecto en serio que aclare si ese tren cremallera es viable o no desde la sostenibilidad y el respeto al turismo que hemos construido todos los asturianos, respetuoso con el medio ambiente y que defendemos que se tiene que mantener y preservar".
OTEA elude pronunciarse sobre si está a favor o en contra del tren cremallera a los Lagos de Covadonga. "Es cierto que en los grandes núcleos turísticos existen infraestructuras así o similares y habría que estudiarlo en serio".
Lo que sí advierten los empresarios del turismo es de que "Cantabria nos está comiendo la tostada en Picos de Europa, un espacio natural al que acude determinado perfil de público que coincide con lo que Asturias quiere para la atracción turística, y no se hace nada. Hace falta más diálogo y más impulso", aseveró el presidente de OTEA.
