Carlos Castro defendió ayer sobre el escenario del pabellón de LA NUEVA ESPAÑA, una amplia variedad de canción ligera, en playback y voz en directo, como lleva haciendo durante sus treinta y dos años de trayectoria musical en el género. Desde que empezó en la Agrupación Artística Gijonesa donde "comencé a prepararme, coger experiencia, comprar equipos y acabé bien formado", aseguró. Un año más, repleto de sus versiones del género popular donde no faltaron la cumbia, el pasodoble y algún merengue, entre otros, que consiguieron reunir a un gran público que llenó el stand. A pesar de su consideración sobre la pervivencia de este tipo de música, que se encuentra "fatal y cada vez peor", dentro del contexto musical español. "Muchos compañeros de profesión creemos que le quedan muy pocos años a la canción popular", explicó el artista. Y adujo "varias razones como: la alta competencia por la proliferación de dj's en las fiestas de prau, o los requisitos para poder llevar a cabo una fiesta en un pueblo, que el 95% de la profesión no puede reunir".

La guinda final a las actuaciones de ayer la puso "Folixa Astur", formado por José Manuel Reguero, "El Maestru", y el gaitero Vicente Prado, "El Pravianu". El dúo humorístico hizo romper a reír a los asistentes con una actuación basada en "un homenaje a nosotros mismos". Un recuerdo a algunas de sus famosas obras, la parodia "Un asturiano en Madrid", escrita en 1990, año de inicio del dueto; y "Los apuros de Pepón". Veintisiete años visitando el stand de LA NUEVA ESPAÑA en la Feria de Muestras y no dejaron a nadie indiferente con "esa socarronería típica del humor asturiano" en la que "intentamos no perder el toque de los clásicos y conjugarla con matices más modernos", según explicó "El Maestru".