Los amigos y familiares de Daniel Rodríguez Prieto, el joven candasín fallecido el pasado miércoles en la cala de Los Curas (Perlora) cuando jugaba a las palas, le dieron ayer el último adiós. Una caravana de vehículos acompañó al coche fúnebre desde el velatorio de Candás hasta el tanatorio de Avilés, donde fue posteriormente incinerado. Los amigos de la víctima pasaron el día en el tanatorio candasín apoyándose unos a otros y arropando a los familiares. Muchos decidieron ir a Avilés para dar el último adiós al joven.