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Competencia amenaza con sancionar a los lagareros por el "pacto del culín"

La Comisión Nacional de los Mercados advierte que el acuerdo entre productores de subir el precio de la sidra "podría constituir infracción"

Competencia amenaza con sancionar a los lagareros por el "pacto del culín"

El supuesto "pacto del culín" para subir los precios de la sidra en Asturias podría acabar amargando el trago a los lagareros. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) amenaza en un escrito con sancionar a los productores por un supuesto acuerdo para actualizar el valor de la botella en sidrerías de Oviedo, Gijón, Villaviciosa, Nava, Avilés y Siero, entre otros concejos de la región. El organismo, encargado de garantizar una "competencia efectiva en todos los mercados", advierte de que el "pacto del culín" podría "constituir una infracción" al incumplir la Ley de Defensa de la Competencia y dar lugar "a un procedimiento sancionador". Entre febrero y marzo, la mayoría de los hosteleros pasaron de vender la botella de sidra sin marca de calidad de los 2,50 euros a los 2,70.

No sería sin embargo la primera vez que Competencia castiga a Asturias por acordar los precios de la sidra y de la manzana. Así sucedió en 1996: el extinto Tribunal de Defensa de la Competencia multó con trece millones de pesetas a hosteleros, lagareros y cosecheros en una sentencia de fecha 12 de diciembre. La cifra fue escasa comparada con la que podría haber impuesto el Tribunal, 150 millones, al tener en cuenta que la Consejería de Agricultura había inducido a estos acuerdos. En aquella ocasión, el pacto consistió en una subida de la botella en 250 pesetas y los colectivos sancionados fueron la Asociación Asturiana de Cosecheros de Manzana de Sidra (Acomasi), la Asociación de Lagareros de Asturias (ALA) y la Asociación Empresarial de Hostelería de Gijón (AEHG). Así lo recuerda el escrito de la Competencia, que la subdirectora Eva Pelayo remitió este año al presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Sidra de Asturias, Tino Cortina.

En ese informe, el organismo hace referencia al artículo 1.1. de la Ley 15/2007, de 3 de julio, de Defensa de la Competencia (LDC), el cual "prohíbe todo acuerdo, decisión o recomendación colectiva (...) que tenga por objeto, produzca o pueda producir el efecto de impedir, restringir o falsear la competencia en todo o parte del mercado nacional y, en particular, los que consistan en la fijación, de forma directa o indirecta, de precios o de otras condiciones comerciales o de servicio". Por ello, explica Competencia, "cualquier acuerdo o práctica concertada por parte de los lagareros podría constituir una infracción y dar lugar a un procedimiento sancionador". El aviso queda ahí y la amenaza de denuncia por parte de la Unión de Consumidores de Asturias, también. El presidente del colectivo, Dacio Alonso, ya avisó en marzo que estudiarían la posibilidad de denunciar ante Competencia "si los hosteleros no se retractan de la subida pactada".

La actualización de los precios de las botellas de sidra comenzó en febrero con chigreros de Siero y rápidamente saltó a sidrerías de otros puntos de Asturias. La subida consistió en unos 20 céntimos, que sitúa ahora el valor de la sidra sin Denominación de Origen Protegida y sin la etiqueta Sidra Seleccionada -esta última marca se incorporó recientemente a la DOP- en 2,70 euros. Los hosteleros sostienen que el aumento del precio es "necesario" y niegan haya sido consensuado.

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