Diana Suárez Sánchez (Oviedo, 1980), fue noticia en LA NUEVA ESPAÑA en el año 2008 por no haber logrado una plaza fija en las oposiciones a profesora de Biología de Secundaria, a pesar de haber obtenido la máxima calificación, debido a la primacía a los años trabajados como interino frente a la nota de la oposición. Actualmente -y por fin- es profesora en el IES Cuenca del Nalón (La Felguera).
- ¿Cómo fue su vida desde ese año 2008?
-Estuve rodando por toda la periferia asturiana como interina hasta que, por fin, en la convocatoria de 2016 aprobé las oposiciones y conseguí plaza fija.
- ¿Fue duro volver a tener que opositar a pesar de su excelente calificación?
-Sí, porque la vida del interino no es muy estable y a cierta edad se tiene menos tiempo para estudiar. Tuve que hacer medias jornadas mientras trabajaba y cuidaba de mi hija, pero al final lo conseguí. El camino no es fácil, pero tenía muy claro lo que quería.
- En aquella noticia publicada en este periódico en 2008 hablaba de su vocación por la docencia.
-Sí, la tenía antes y la sigo teniendo ahora. Esto es mi vida y no puede haber nada mejor que encontrarme a mis alumnos por la calle y que me cuenten que están con el MIR.
- ¿Cómo recuerda el momento en el que supo que no iba a tener plaza, a pesar de su calificación?
-Me sentí muy orgullosa de mí misma pero, a la vez, fue muy frustrantre porque no sirvió para nada. Ahora, que lo veo desde otra perspectiva, me alegro de haber ayudado a cambiar algo.
- ¿Cambió algo?
-A raíz de la noticia publicada en este periódico surgieron muchas críticas, los sindicatos se sentaron a pensar en mi caso y el baremo de medir cambió. Ahora mucha gente puede acceder a plazas con una nota alta, en cualquier especialidad, a pesar de no tener años de experiencia.
- ¿Cree que tendrá consecuencia restar los años de experiencia de los opositores?
-No soy una persona de extremos y sé que la experiencia también es importante. Debe ser difícil equilibrar este tipo de cosas pero también sé que no es justo que una persona con tres dieces no tenga plaza y tenga que volver a estudiar.
- ¿Cómo fueron esos años como interina?
-A pesar de todo, fueron muy agradecidos porque he pasado por muchos centros donde he tenido compañeros increíbles que me han apoyado mucho con mi situación. Tener a alguien que te diga "tú puedes" y que haya pasado lo mismo ayuda, y mucho.
- Claro, en sus segundas oposiciones también era madre.
-Sí, nació en el 2014, justo a la mitad. Los últimos cuatro meses antes de opositar tuve que pedirme una excedencia, sin cobrar, por supuesto, para poder estudiar.
- ¿Es una complicación más al opositar el ser mujer?
-No lo creo. Hoy en día hay mucha igualdad en el hogar. Yo creo que es un tema de edad, hay muchas más cosas que compaginar y no se puede dejar ninguna de lado.
- ¿Cómo considera que es la situación de la educación pública en España?
-Creo, o al menos en mi caso es así, que todos los funcionarios empezamos con ilusión de mejorar las cosas y que todo se puede mejorar. Tenemos que trabajar todos juntos, no solo en el aula, también desde arriba.
- ¿Cómo es la situación de las oposiciones en Asturias respecto a otras regiones?
-En otros sitios, las listas están blindadas y eso favorece a los que llevan años trabajando como interinos en esa región. Por ejemplo, en Cataluña o Galicia los interinos están protegidos por el idioma. La llingua asturiana no está al nivel del catalán, desgraciadamente.
- ¿Se deberían blindar las listas aquí?
-Tampoco sé si habría que hacer eso, pero al menos habría que estudiar alguna manera para favorecer a los interinos que llevan años recorriendo la periferia asturiana.
- ¿Es complicado acceder a una plaza en Biología y Geología?
-No puedo compararla con otras especialidades, pero sí que puedo decir que hay mucha demanda de plazas. Antes de la convocatoria de 2008 fue la de 1998. Fueron diez plazas en diez años.
- Me imagino el número de interinos esperando plaza.
-Y, a pesar de la convocatoria de 2016, se necesitan más. Se ha prometido otra convocatoria para los próximos cinco años. Solo espero que la oferta de plazas sea adecuada y que dé respuesta a la demanda real. No solo en Biología, en el resto de especialidades también.
- ¿Cómo está la enseñanza en comparación con otros países de Europa?
-Dicen que la enseñanza en España no es de calidad, pero tampoco se nos dan las herramientas para estar al nivel de Suiza.
- ¿Y los Centros de Profesorado y de Recursos?
-Ofrecen cursos, pero no creo que sea suficiente para que nos pongamos al nivel de otros países. No se puede decir que los responsables de los resultados del informe PISA son los profesores, hay que cambiar el sistema educativo desde arriba.
- Y cada día la educación es más importante.
-No siempre nuestra labor está reconocida pero sí, sin desprestigiar otras profesiones, nosotros estamos formando las mentes que serán el futuro del país. En el siglo XXI es algo fundamental la educación en valores.
- ¿Cómo va la integración de las nuevas tecnologías?
-Ha cambiado mucho desde que yo estudiaba y se están aplicando dentro de las aulas, por ejemplo, utilizando pizarras digitales. Sin embargo, los profesores a veces estamos muy ocupados con tareas burocráticas y de papeleos que nos resta tiempo a nuestras actividades docentes y a preparar las clases.
- ¿No hay tiempo?
-A veces se cree que los profesores solo trabajamos 21 horas a la semana y eso no es cierto. Dedicamos muchísimas horas a preparar nuestras clases.
- Después de tantos años, ya es libre de las oposiciones, ¿cómo se siente?
-Pues, en realidad, no lo he dejado atrás. Me considero una persona bastante emprendedora y junto a un grupo de gente hemos creado una especie de centro de preparación para las oposiciones. Se llama "Preparadores método diez".
- Buen nombre, teniendo en cuenta su historia.
-Siempre me quedó esa espinita de ayudar a otros que se encontraran en situaciones similares a la mía. Es un proyecto aún en pañales, hace dos días lanzamos la página web pero estoy muy ilusionada.
