Marta Renedo se relajó ayer de compras en unos grandes almacenes la víspera del fallo que puede condenarla a diez años de prisión, la solicitud de pena de la Fiscalía, que las acusaciones elevan a más de treinta años. "Estoy expectante, nunca vi que una sentencia tardase tanto", aseguró la exfuncionaria, ahora abogada en ejercicio que lleva sobre todo asuntos de cláusulas suelo. Hoy viernes despejará las dudas sobre su futuro, aunque su letrado siempre ha dicho que llegará a donde haya que llegar en caso de sentencia condenatoria. Renedo aseguró que no le ha llegado ninguna pista de cuál puede ser el fallo.
Esta será una mañana crucial para los encausados en el "caso Marea", que conocerán por fin la sentencia de la sección tercera de la Audiencia en el mayor caso de corrupción de Asturias, con un menoscabo a las arcas del Principado de unos seis millones, dos de ellos atribuidos a la propia Marta Renedo y el resto a la exdirectora general María Jesús Otero. A trece meses de la finalización del juicio, siete años y siete meses después de que se presentase la denuncia que dio lugar a las investigaciones, llega el fallo más esperado. Los letrados unen a la tensión propia de la sentencia el temor a que el sistema de notificaciones judicial, Lexnet, pueda fallar como ha hecho en el pasado. Por ello, algunos letrados se desplazarán al Juzgado en persona para conseguir el fallo.
Los acusados están en capilla. Han tenido que permanecer localizables, con la obligación de firmar en el Juzgado cada quince días. La mayoría vive con tensión estos momentos, todos salvo el exconsejero José Luis Iglesias Riopedre, convencido de su inocencia y que se ha mostrado impertérrito, cuando no divertido en algunos momentos del proceso. También para él solicita la Fiscalía diez años de cárcel. La suerte está echada para los trece encausados.
