El portavoz de IU en la Junta General, Gaspar Llamazares, cargó ayer contra la Consejería de Sanidad, que encabeza Francisco del Busto, por la anulación del nombramiento del nuevo director de Silicosis por sentencia judicial. "Se trata de un nuevo fiasco en materia de nombramientos", aseguró. Pero en opinión del político, "sobre todo muestra la falta de voluntad de cambio en relación al Instituto Nacional de Silicosis por parte de esa Consejería".

El ingeniero mierense Luis Díaz López, fue designado para el cargo el pasado mes de marzo tras ser elegido entre siete candidatos a dirigir el Instituto Nacional de Silicosis. Curiosamente, cinco eran ingenieros y sólo dos médicos. La Consejería se inclinó por el perfil de un ingeniero con la intención de dar un nuevo enfoque al Instituto, otorgando un mayor protagonismo a las relaciones con empresas tanto españolas como extranjeros que les encargan los trabajos.

Llamazares apuesta por un cambio en el Instituto, "necesario para dar mayor autonomía y para una orientación de salud laboral" por parte de la entidad, como se había previsto en el pacto de investidura. "Pero el Gobierno ha optado por un perfil técnico en vez por uno de salud laboral o de salud pública", recriminó.