El cambio de ciclo en la Federación Socialista Asturiana (FSA) ha recibido carta de naturaleza esta mañana en la jornada de clausura del trigésimo segundo congreso. Sin acallar la disidencia, la mayoría que lidera el nuevo secretario general, Adrián Barbón, confirmó la toma de control en las votaciones que esta mañana dieron de paso la renovación total en los órganos de dirección del partido con un 64 por ciento de los votos a su favor y en torno a un 35 de rechazo. Después de la escenificación de la fractura interna hasta la madrugada de ayer, después del rechazo de la minoría perdedora de las primarias al reparto monocolor de cargos en la Ejecutiva y la presentación de dos candidaturas separadas en el proceso de reforma de los órganos del partido, la votación de las dos listas de las dos facciones dejó los comités autonómico y federal con una representación más o menos proporcional a la correlación de fuerzas que emergió de la primarias del día 17.
De los 102 miembros del Comité Autonómico elegidos ayer y que encabeza el joven militante luarqués Óscar Pérez por delante de Sandra Cuesta, de Colunga, y del sucesor de Barbón como alcalde de Laviana, Julio García. Los 37 restantes serán para afines al candidato derrotado en el proceso electivo de hace quince días, José María Pérez, en una lista que lidera el consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra, por delante de dos de los principales apoyos de Pérez en la campaña de las primarias, Consuelo Antuña y Manuel Campa. Los seguidores de Barbón recibieron 208 votos, un 63,8 por ciento, y los de Pérez, 117, un 35,19. La representación en el Comité Federal tendrá tres partidarios de Barbón (el alcalde de Oviedo, Wenceslao López, Belén Rivas y José Luis Fernández Roces) y contará con el propio José María Pérez como único representante de su corriente. El congreso de la FSA ha dado además de paso la ejecutiva presentada por el nuevo secretario general, hecha exclusivamente con sus apoyos, con sus 32 componentes y un respaldo del 64,41 por ciento de los votos emitidos (210) y 113 de sufragios en blanco, un 34,6 de la única forma de rechazo que permite el procedimiento.
El plenario del trigésimo segundo congreso también ha asentido hoy por amplia mayoría al dictamen de la comisión que ayer oficializó la apuesta del partido por la oficialidad del asturiano -la iniciativa obtuvo 223 votos a favor, 36 rechazos y 13 abstenciones- y el texto en el que se inserta la adhesión de la FSA a la configuración plurinacional del Estado que ya respaldó el congreso federal del pasado junio y que ha recibido 215 respaldos, 68 votos en contra y doce abstenciones.
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