Segunda denuncia en menos de un mes de un grupo conservacionista por las batidas de lobos autorizadas en la región. La Coordinadora Ecologista de Asturias ha puesto en conocimiento de la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Asturias "la caza de un lobo el pasado domingo en una batida dentro de la Reserva de Caza de Cangas de Narcea", al considerar que de ello puede derivarse la comisión de un delito de tipo penal. Esta denuncia se suma a la ya realizada por el Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF España). A consecuencia de ello, la Fiscalía de Medio Ambiente investigará si la medida para abatir ejemplares en zonas de presencia esporádica de la especie se ajusta a la legislación. La consejería de Medio Ambiente se apoya para permitir los controles con cazadores -siempre tienen que ir acompañados de la Guardería del Medio Natural- en la ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, el reglamento de caza de 1991, el II Plan del lobo y el programa anual de actuaciones.
La Coordinadora Ecologista señala que "la Resolución de 24 de febrero de 2017, de la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, por la que se aprueba el Plan de Caza de las Reservas Regionales de Caza para la temporada 2017-2018, no recoge la posibilidad de cazar lobos en las mismas". Por eso, los conservacionistas entienden que "la caza de un lobo en la Reserva Regional pudiera estar incluido en el delito previsto y penado en el artículo 334 o 335 del Código Penal o incluso un delito de prevaricación previsto y penado en el artículo 404 del Código Penal, por lo que esperemos que se investiguen los hechos denunciados y se persiga a los responsables que autorizaron y mataron al lobo". Una veintena de organizaciones pidieron ayer al Principado la suspensión de las batidas. Esta semana está previsto que comiencen en la sierra del Cuera.
