La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

MIGUEL ÁNGEL AGUILAR GARCÍA | Fiscal coordinador de la Fiscalía de Barcelona

"La expulsión de policías de hoteles en Barcelona puede ser un delito de odio"

"Se considera que Policía Nacional y Guardia Civil son cuerpos de seguridad estatales y la agresión por motivos de nación es discriminación"

Miguel Ángel Aguilar García. JULIÁN RUS

"Los delitos de odio y discriminación: aspectos prácticos para su efectiva investigación y enjuiciamiento. Especial referencia a los delitos contra la integridad moral" fue el título de la conferencia ofrecida en el Colegio de Abogados de Oviedo por Miguel Ángel Aguilar García, fiscal fundador y coordinador del Servicio de Delitos de Odio y Discriminación de la Fiscalía Provincial de Barcelona, que ya se ha convertido en un referente nacional.

- ¿Qué es un delito de odio?

-Cualquier delito que lo diferencie la motivación del autor y su voluntad, porque menosprecia y odia a la víctima, que es seleccionada por motivos concretos, como la raza, la etnia, la religión, el sexo, pertenecer a un grupo social determinado... Puede ser por muchas cosas.

- ¿Hay muchos delitos de odio en España?

-Las estadísticas son recientes, pero sí se constata que cada año aumentan el número de casos; lo que no sabemos es si es porque hay más o es que afloran más. Aún así, no tenemos más que en el resto de Europa. Lo que sí es importante es que los estudios de la Unión Europea hablan de que el 80 por ciento de los hechos que se producen no se denuncian.

- ¿Por miedo?

-Por miedo, porque supone exponer públicamente una condición oculta, como ser homosexual, y también porque se desconoce que se puede estar siendo víctima de un delito de odio.

- ¿Puede poner un ejemplo?

-Suponga que le deniegan la entrada a un local por el color de su piel o por su etnia. Esa persona no lo denuncia, porque a lo mejor está en el país de manera ilegal y no sabe que es víctima de un delito de odio, pero tampoco lo denunciaría por miedo a que se conozca su condición y se le expulse.

- Usted ha destacado en su conferencia la importancia de los detalles que deben figurar en los atestados policiales, por insignificantes que parezcan.

-Es que hay indicadores que son fundamentales para la correcta identificación y acreditación de los delitos de odio, y eso permite que se puedan aplicar mayores penas. Por ejemplo, los lugares en los que se producen, las fechas, las amenazas preexistentes, la pertenencia a grupos extremista, la estética. Por ejemplo, si la agresión se produce a la salida de una sinagoga o una mezquita; si es por ejemplo el día 20 de abril, que es la fecha de nacimiento de Hitler, la numerología...

- ¿Se refiere a que los agresores lleven números tatuados?

-Eso es. ¿Sabe que significa el 88? Heil Hitler, el saludo fascista. El 8 se corresponde con la letra H. Y si lleva tatuado el 18, pues es Adolf Hitler. Los indicadores son muchos, pero son muy importantes para poder centrar la acusación en el delito de odio.

- ¿Cuál es entonces el perfil del autor de un delito de odio?

-Hablamos de indicadores, no de perfiles, porque son muy plurales. Es cierto que puede tratarse de integrantes de grupos extremistas, pero también puede ser cualquier ciudadano, de cualquier edad o de cualquier estatus económico y cultural. A veces el racismo responde a un determinado planteamiento ideológico, y otras veces es más de tipo clasista: no molesta alguien por su color de piel si es rico, pero no ocurre lo mismo si no lo es.

- Aún así, debe ser difícil demostrar un delito de odio como tal.

-Sí. Me llegaron a decir en un Juzgado que utilizaba los datos policiales para construir al autor de un delito. Ahora ya hay una sentencia del Tribuna Europeo de Derechos Humanos que facilita el trabajo.

- ¿Las redes sociales son un escollo más o les ayuda en las investigaciones?

-Son un espacio social más. La dificultad es mayor porque los autores utilizan perfiles anónimos o falsos. En internet se cometen delitos, pero también los autores dejan pruebas sin darse cuenta. Tuvimos una agresión a un chico hindú que fue atacado por un grupo neonazi. Pero se hicieron una foto y la colgaron en internet. Eso nos facilitó mucho la labor.

- La Fiscalía ha denunciado la expulsión de policías nacionales y guardias civiles de hoteles en Barcelona con motivo del referéndum ilegal del 1-0.

-Lo metimos en los tribunales porque esa expulsión puede constituir un delito de odio. Se considera que son cuerpos policiales estatales y las agresiones por motivos de nación es un motivo de discriminación. Si no fuera porque a todos esos agentes se les consideraba españoles, ¿se hubieran producido esos hechos? Por eso se denunció, para que se iniciara una investigación.

- Sorprende que hable en este caso de un posible delito de odio.

-Porque se desconoce. Por eso es importante avanzar en que el ciudadano lo conozca, y que poco a poco vamos transmitiendo confianza y seguridad al ciudadano para que se denuncie e investigue.

Compartir el artículo

stats