Según los datos que la Red Europea presentó en el Parlamento de Asturias el pasado octubre, en el Principado los pobres son más pobres después de la crisis. Aunque el número de personas en riesgo de exclusión ha disminuido, la cifra aún sigue siendo alarmante: un 18,5% de asturianos está en riesgo de pobreza. Unas estimaciones con las que el Banco de Alimentos encara su sexta gran recogida. En un acto presentado esta mañana en el aula magna del edificio histórico de la Universidad de Oviedo, los responsables de la organización dieron el pistoletazo de salida de una campaña que arrancará el 27 de noviembre y llegará hasta el 2 de diciembre.
Desde ese día, el objetivo será mantenerse en la cifra de los 200.000 alimentos recogidos por los más de mil voluntarios que participarán en esta temporada. El eslogan de este año se centra precisamente en esa cifra: "200.000 kilos de alimentos y 200.000 sonrisas", que "son las que tendrán los voluntarios que recogan los alimentos y también los centros y personas que los reciban", comentaron los responsables. Los puntos de recogida serán colocados por todo el Principado y estarán presentes en centros escolares, grandes superficies comerciales, empresas privadas y también ayuntamientos. Los alimentos que priman son los no perecederos, aunque todos "son bienvenidos".
Por último, el Banco de Alimentos quiso dejar claro que la recogida sólo es una parte de su objetivo, que se completa con una labor de sensibilización de la sociedad asturiana. Por ello, los esfuerzos de la asociación también van dirigidos a concienciar a los habitantes del Principado de las necesidades de las personas en riesgo de pobreza, tal y como se muestra en este vídeo:
