Joaquín María Fernández González, quien fuera profesor durante décadas en la Universidad Laboral de Gijón y terminase su carrera docente como bibliotecario en el instituto Pando de Oviedo, falleció ayer domingo en Oviedo a los 70 años, tras una larga enfermedad contra la que luchó ejemplarmente en los últimos meses. Licenciado en Derecho, Fernández González nació en Avilés en 1947, aunque toda su vida ha estado vinculado a Pola de Siero. También está vinculado a Oviedo, donde ejerció la abogacía. El fallecido deja viuda, Maribel Rodríguez, y un hijo, el médico Chema Fernández, internista en el Hospital de Cangas del Narcea, y además portero del Condal de Noreña.

El paso por la Universidad Laboral de Gijón de Fernández González dejó un entrañable recuerdo. Allí fue profesor y director de residencias, también tutor, educador y ayudante de colegio. Es en esa faceta de tutor donde dejó una mayor impronta y se ganó el cariño de numerosos alumnos.También era un gran montañero, que recorrió los Picos de Europa, la Cordillera y los Pirineos. Sentía un amor especial por la montaña del Suroccidente, y será allí, en el cementerio de Arayón, en Cangas del Narcea donde repose.

La capilla ardiente ha quedado instalada en el tanatorio de El Salvador de Oviedo, donde ayer fueron numerosas las personas que acudieron para dar su pésame a la familia. Hoy a las dos de la tarde tendrá lugar el rito exequial de despedida de cuerpo presente en la capilla del tanatorio. Posteriormente, será enterrado en Arayón.