"La Variante de Pajares supondrá un ahorro de 70 minutos porque van a ser 40 kilómetros menos de trazado. El recorte de tiempos no es por la velocidad". El geólogo José Antonio Sáenz de Santamaría resumió en esas palabras el avance que supondrá la futura conexión ferroviaria de Asturias y la menor relevancia que tiene, a efectos de duración del viaje, la velocidad que puedan alcanzar los trenes. Una postura que apuntaló Vicente Luque, el presidente de la Plataforma Tecnológica de los túneles de Pajares, quien afirmó que la optimización de tiempo ya será posible con trenes que puedan circular a 200 kilómetros, como los que operan en Alemania.

Vicente Luque y José Antonio Sáenz de Santamaría protagonizaron ayer unas jornadas, organizadas por Ciudadanos para reprobar el viraje del Ministerio de Fomento sobre el ancho de vía, y que contaron con la presencia de Alberto González, representante de los empresarios asturianos, que fue rotundo sobre la Variante: "hay que abrirla cuanto antes y para tráfico de mercancías y viajeros".

Sáenz de Santamaría, presidente del Colegio de Geólogos de Asturias, destacó que la Variante "es la más compleja obra ejecutada en España en España en los últimos 50 años" y puso un ejemplo muy gráfico del "gran reto" que ha supuesto dicha actuación al pedir a los asistentes que imaginasen la dificultad que entrañó "levantar una dovela más grande que la Catedral de Oviedo a 750 metros de profundidad. Y se hizo" .

Luque, ingeniero de minas, destacó que Pajares "tiene mayor tránsito" que el Corredor Mediterráneo y subrayó la importancia de que los puertos marítimos del Noroeste español, con el Musel, sean incluidos en el Corredor Atlántico ferroviario. El presidente de la Plataforma Tecnológica de los túneles de Pajares, entró en detalles sobre lo que supone elegir un ancho de vía u otro. "Una vía acondicionada para circular a 320 kilómetros por hora, actualmente sólo vale para viajeros, tiene que estar como si fuera para Fórmula 1; en cambio una vía para ir hasta 250 kilómetros, como la mayor parte de la red existente en Alemania, requiere una conservación menor y pueden ir perfectamente las mercancías", comentó Luque, quien añadió que potenciar el transporte ferroviario por la variante contribuiría a la reducción de emisiones de dióxido de carbono.

El secretario de la plataforma para el impulso de la logística del Noroeste, Alberto González, puso voz a las reivindicaciones de la sociedad civil. "Que acertemos o no va a condicionar el futuro de Asturias muchos años", advirtió el representante de la patronal asturiana, quien planteó que la Variante "debe abrir para el tráfico de mercancías y viajeros lo antes posible. Es muy importante el cuándo pues que sea en 1, 5, 10 o 15 años va a cambiar mucho nuestra capacidad competitiva". Para González, "se trata de una decisión de sentido común porque reducirá los costes actuales, nos hará más competitivos y bajará las emisiones de CO2 entre un 10 y un 23 por ciento".