Son 39 los profesores asturianos que a lo largo del curso 2016-17 se acercaron al Defensor del Profesor, del sindicato ANPE para denunciar situaciones de acoso, insultos, amenazas, problemas con los compañeros, falsas acusaciones o, en un caso, daños reiterados sobre su vehículo. Todo ello en el marco de su ejercicio profesional. Uno de los casos, una agresión física de un padre de alumno, llegó a juicio. Cuatro de los docentes denunciaron haber sido injuriados y ridiculizados en las redes sociales.

Son algunos de los datos que se desprenden del informe anual que ANPE Asturias realiza sobre este servicio, abierto a todo el profesorado (también el de los centros privados o privados concertados) y que incluye apoyo psicológico. "Son los casos planteados por 39 valientes que se han atrevido a plantear su problema, pero son la punta del iceberg. Ellos se defienden pero a la vez están defendiendo a toda la profesión", señala el presidente del sindicato en el Principado Gumersindo Rodríguez.

ANPE critica a la Administración educativa. A un servicio de Inspección "inoperante" en muchos casos, y a una Consejería "que sigue sin habilitar un sistema de asistencia jurídica automática". Las estadísticas del último curso en Asturias dejan ver un aumento considerable en el capítulo de "acoso, enfrentamiento, insultos y amenazas de las familias", que aparece en 21 casos. Hay que tener en cuenta que los 39 denunciantes indican en la explicación de sus problemas laborales distintas casuísticas asociadas a un mismo caso.

El Defensor del Profesor recibió 259 denuncias desde 2006, su año de implantación.