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"El área de distribución del lobo crece y eso es innegable, en Asturias y hasta en Madrid"

"Está claro que la población de esta especie no aumenta de forma explosiva y que tampoco está en peligro de extinción"

Luis Llaneza, ayer, en el RIDEA. IRMA COLLÍN

- ¿Crece el número de lobos en Asturias o va a menos?

-Está claro que las poblaciones no crecen de manera explosiva y, por supuesto, el lobo es una especie que no está en peligro de extinción. ¿Cuántos hay? No se puede dar una cifra porque censar lobos es tremendamente difícil, pero determinar números exactos no es a mi juicio una cuestión determinante. Es mejor hablar de tendencias.

Luis Llaneza Rodríguez (Blimea, 1966) es biólogo, fundador de Arena, una empresa de asesoría en recursos naturales, con sede en Lugo, y lleva trabajando en estudios sobre el lobo en Galicia, Asturias y Castilla y León desde hace casi tres décadas. Ayer participó en una de las mesas redondas de las jornadas "El lobo en Asturias. La gestión de un conflicto", que se celebra estos días en el RIDEA, en Oviedo.

- Dicen los ganaderos que los lobos nos van a entrar en casa.

-Es innegable el crecimiento del área geográfica de distribución de esta especie en Asturias. Ocurre aquí y en otras partes de España, llegan a Las Regueras pero también a Madrid.

- Dicen los ecologistas: a más controles, más daños.

-Conozco esos estudios, que conviven con otros que dicen justamente lo contrario. Frente a resultados contradictorios lo mejor es ser humildes y pensar que la ciencia no es un dogma.

- Coinciden ecologistas y ganaderos: la gestión de la Administración no gusta.

-Mi empresa trabaja como asesora de la Administración . Mi experiencia me dice que ser gestor del lobo no es fácil porque este es un tema tan pasional que vas a recibir palos de todo el mundo. Lo que tiene que hacer la Administración es disponer del mayor conocimiento posible porque es la mejor forma de tomar buenas decisiones.

- Los resultados de las batidas organizadas contra los lobos suelen dar resultados muy escasos. ¿Cómo explicarlo?

-Primero porque es un animal muy listo. El lobo ha sufrido una persecución secular, durante mucho tiempo podía ser matado de cualquier manera, incluyendo trampas y venenos. La especie estuvo a punto de extinguirse por los años sesenta, pero se trata de un animal con peculiaridades biológicas, con gran adaptación a los paisajes antropizados. Y que aprende de continuo. No me extraña que a veces las actividades de control den resultado cero.

- ¿Cómo contrarrestar la presión del lobo en ciertas zonas?

-La capacidad de carga es el número de animales que un determinado ecosistema puede admitir. La capacidad cultural de carga es el número de animales que la sociedad está dispuesta a admitir. En ciertos sitios igual la presencia del lobo no es viable por problemas sociales. Porque aquí no estamos hablando de un problema biológico, sino social.

- ¿Qué soluciones ve, si es que las hay?

-Hay que quitar hierro al asunto, reducir el ruido, hacer caso a las investigaciones científicas y buscar un marco de coexistencia, asumiendo que ese marco supondrá algunos daños. Y claro que se pueden encontrar puntos de encuentro.

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